El precio de las flores se dispara hasta un 50% por el Día de los Difuntos en Andalucía

La tradición de poner flores a los difuntos se remonta en el tiempo en Andalucía. En la antigüedad se llevaban flores para la despedida de los fallecidos por para recordar a los seres queridos. El origen de esta tradición estaría en la actual Israel y data de hace más de 13.000 años, durante la edad de piedra. El salmo 103 señala que «los días del hombre no son sino hierba: crecen como las flores del campo; cuando el viento pasa sobre ellas, desaparecen...». El Día de los Difuntos es una de las jornadas, si no la que más, de más demanda de flores en la comunidad andaluza. Los cementerios se llenan de claveles, crisantemos y otras variedades. En los últimos años, a lomos de la inflación y las crisis del sector, el precio de las flores ornamentales se ha disparado hasta un 50%. El año pasado, tras dos años de parón por la pandemia, los incrementos ya se iban al 30%, por lo que en cuatro años en muchos casos los precios se han duplicado. El importe de las flores más vendidas se eleva por el aumento del coste de los fletes, la energía y el cambio climático. El precio de venta al público de los crisantemos, sube hasta un 50% y el de los claveles, un 40%. Con todo, la previsión en el sector es duplicar las ventas durante estos días.

La presidenta de la Federación Andaluza de Floristas y Plantas, María Castillo, destacó a Europa Press la importancia que tiene para los establecimientos las ventas que se producen por la festividad de Todos los Santos en los pueblos y que pueden llegar a representar «hasta el 50%» de la facturación del año.

Cada variedad de flor tiene su significado. Así, los claveles simbolizan admiración. Los gladiolos significan sinceridad, al igual que los lirios y las azucenas. También los crisantemos, probablemente, las flores con más demanda en el Día de los Difuntos y el de Todos los Santos.

Asociaciones de consumidores como Asescon han solicitado que no haya «subidas abusivas del precio de las flores» en esta jornada festiva con «uno de los actos de consumo que se repiten cada año» como «la compra y colocación posterior en las sepulturas de flores en honor a los difuntos». La entidad señaló que «la oferta de flores en estos días es amplia: para todos los gustos y bolsillos. Y, desgraciadamente, tal y como indican los ciudadanos, las flores se encarecen esta semana de forma considerable». «Muchos ciudadanos nos indican que en algunos casos el precio de las flores que se venden con motivo de la festividad de Todos los Santos ha subido hasta el doble respecto a su precio habitual durante el resto del año», denuncian desde la entidad. Asescon solicitó que «no se haga un abuso de cara al consumidor en estos días a la vez que recomendamos que se haga una comparativa de precios entre los distintos establecimientos para amortiguar esta subida de precios».

Los precios

Según el Observatorio de Precios y Mercado de la Junta de Andalucía, no todas las flores cortadas presentan el mismo comportamiento. El lilium estaba, las 100 unidades, en octubre de 2022 a 63,67 euros y el precio medio recogido es de 64,13 euros. El crisantemo en noviembre de 2022 estaba en 57,49 euros y en septiembre de este año, a casi 50 euros. El precio medio de un ramo de flores para lo difuntos se va a los 20-25 euros. La paniculata (una flor blanca que se mezcla con otras de mayor tamaño) también prevalece. Las margaritas y los gladiolos también tienen gran demanda en estas fechas.

Consumo recuerda que no existe derecho a desistir de la compra si se adquieren flores a través de internet

La Dirección General de Consumo de la Junta de Andalucía, ante la cercanía de la festividad, trasladó a los consumidores una serie de recomendaciones sobre uno de los productos cuya venta se multiplica en esta fecha y en otras como San Valentín. Por ejemplo, en los alrededores de los camposantos, los precios serán superiores. En cualquier caso, las floristerías no suelen admitir la devolución de los productos.

Los invernaderos de Chipiona y Sanlúcar de Barrameda son dos de los principales que llenan de flores cementerios de toda España y también de Portugal en la festividad. A la inflación y la demanda, se ha unido este año que la borrasca Bernard ha provocado cuantiosos daños en los invernaderos de la flor cortada de la provincia de Cádiz.

Asaja avanzó que los daños se produjeron tanto en cultivos como en infraestructuras y en cultivos, según recogió Efe. Los leñosos como la aceituna también se visto muy afectados por la enorme cantidad de frutos caídos al suelo, lo que ha venido a complicar aún más una cosecha que ya venía mermada por la sequía que viene asolando la comunidad.

El temporal Bernard afectó a la flor cortada en la costa noroeste de Andalucía (Sanlúcar de Barrameda y Chipiona), así como en Conil de la Frontera y Nueva Jarilla (Jerez de la Frontera). La borrasca Bernard provocó numerosos daños en los invernaderos de la flor cortada de la provincia de Cádiz, unas perdidas que se produjeron en los días previos a una de las fechas clave para las ventas, el Día de Todos los Santos y el de los Difuntos. El sector de la flor cortada encaró una de las campañas más fuertes del año ahogado por la escasa rentabilidad de los cultivos. Cádiz acumula el 65% de la producción nacional.