Las personas que rechacen "empleos razonables" no deberían tener derecho a la prestación por desempleo. Esta es una de las propuestas que ha hecho el PP durante la presentación de la ponencia política que llevará a su próximo Congreso.

Los populares están presentando este martes en Sevilla la ponencia política de su XXI Congreso Nacional --que celebrará en Madrid entre los días 4 y 6 del próximo mes de julio-- con la participación del presidente de la Junta y del PP de Andalucía, Juanma Moreno; el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco; la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, y la eurodiputada del PP Alma Ezcurra, encargados de la elaboración de este documento con el que los populares buscan un rearme ideológico para afrontar las próximas citas electorales.

En concreto, Fernández Mañueco ha comentado que "hay que darle valor al trabajo y que merezca la pena trabajar". En este sentido, ha dicho que aquellas personas "que rechazan ofertas de empleo razonables están devaluando el trabajo de quiénes se están esforzando por encontrar trabajo o aquellos que están trabajando duro por mantener su empleo". La propuesta no aclara qué se entiende por "ofertas de empleo razonables".

Por ese motivo, el presidente de Castilla y León ha asegurado que aquellas personas que "rechazan ofertas de trabajo razonables no tienen derecho al desempleo. Estamos viendo que hay muchas posibilidades de trabajo y sigue habiendo personas en situación de desempleo".

Mañueco ha optado por políticas de empleo "más ágiles" y reforzar el binomio "empresarios-trabajadores" para seguir creando empleo.

Por su parte, la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, ha hecho una defensa del municipalismo y ha apostado por "políticas eficaces y rápidas para incrementar la oferta de vivienda", especialmente "de suelo edificable" e "incentivos fiscales a los jóvenes".

La eurodiputada del PP, Alma Ezcurra, ha considerado que una de sus principales preocupaciones en la política son los jóvenes: "Sienten que el sistema les ha fallado" y que "van a vivir peor que sus padres" porque se ha "roto el mito del progreso".

Ezcurra ha dicho que hay que "convencerles" y "traerles de nuevo al sistema".

La ponencia del PP A critica la situación actual de España y lamenta que los actuales dirigentes socialistas vieron en las fuerzas independentistas "su única oportunidad para acceder al Gobierno", y dejaron atrás "décadas centradas en la construcción de un país más integrado y robusto".

"La Transición política y la cohesión nacional han sido sus víctimas. Formaciones que solo defienden los intereses de una parte, que trabajan abiertamente por la desintegración o que, incluso, han sido condenados por sedición, controlan la gobernabilidad y tienen la última palabra sobre las políticas de Estado", avisa la formación.

El PP también hace hincapié en los "indultos a condenados por el Tribunal Supremo, la eliminación del delito de sedición, la reducción de penas a la malversación y la supresión de contrapesos al poder y politización de los órganos constitucionales como primeras consecuencias de los acuerdos".