Radiografía de la prostitución en Andalucía: 300 clubs y 4.000 mujeres

Andalucía contabiliza, según las inspecciones de la Guardia Civil , 18.230 trabajadoras del sexo –una inmensa mayoría de esclavas sexuales por un ínfimo porcentaje de mujeres que reclaman su derecho a decidir sobre la mercantilización de su cuerpo–, de las que 17.550 ejercían en locales de alterne y 680 en la calle. La andaluza es la región en la que más inspecciones en prostíbulos se contabilizaron con 1.060 en cuatro años. Internet ha cambiado el modelo de prostitución, con páginas de contactos e incluso foros donde los hombres que pagan por sexo comentan y puntúan a las mujeres prostituidas o el local. Según un informe del IAM, la prostitución ha cambiado mucho, y lo ha hecho muy rápido. «Ya no nos sirven las conceptualizaciones clásicas de prostituta y proxeneta; ya no es exclusivamente una manifestación de exclusión y marginación social. Ahora es un elemento central de lo que se ha venido a llamar Industria del Sexo, un fenómeno socialmente aceptado, promovido, y publicitado donde mucho se conoce sobre la modernización de la imagen de este mercado sexual, y muy poco sobre las condiciones de las mujeres que dependen de él para sobrevivir». Según Médicos del Mundo, «las consecuencias del ejercicio de la prostitución para la salud mental son similares a las que sufren las personas sometidas a torturas».

El informe del IAM «La prostitución en la comunidad autónoma» ofrece una radiografía completa por provincias y aborda el fenómeno del «reemplazo», « la sustitución de unas mujeres por otras» de forma obligada y en un ciclo temporal muy corto (uno o dos meses). Se trata del actual «sistema de plaza»: puede ser impuesto por parte de los que organizan la prostitución, con la mujer está forzada a cambiar de sitio; o puede ser asignado y la mujer aunque no ejerza de forma organizada está obligada a cambiar porque «las cosas funcionan así». La comunidad andaluza cuenta con unos 300 clubs y alrededor de 4.000 mujeres prostituidas, según el informe del ente público.

ALMERÍA

Almería, junto a Málaga, es la provincia donde más pesan los factores endógenos a la hora de establecer las características de la prostitución. Presenta rasgos comunes a todo el territorio andaluz como la disminución del número de españolas, el aumento del volumen de prostitución o el auge de clubs y de las mujeres extranjeras. Pero tiene «tipologías propias que no aparecen en otras zonas agrícolas y turísticas» y que guardan relación con los asentamientos de población inmigrante en determinados territorios, concretamente la comarca del Poniente, y que «hacen referencia a las características culturales de dichas comunidades, que son en el fenómeno de la prostitución, las subsaharianas». Almería es la primera provincia de prostitución de mujeres subsaharianas (nigerianas y senegalesas mayoritariamente). Se estima que hay unas 600 prostitutas, según el informe y clubs, 25, que se elevan a 50 contando otro tipo de locales, con una media de 10 mujeres por recinto.

CÁDIZ

Cádiz «representa el final del la transición del club de carretera al Hotel de Plaza». La mayor parte de los clubs se concentran en el eje de la Nacional IV y son definidos como «Hoteles-Club»: «no han alcanzado todavía el grado de modernización en cuanto a infraestructuras pero sí funcionan mayoritariamente con el sistema de estancia intensiva y reemplazo de mujeres». Al igual que en el resto de provincias (menos Sevilla y Almería) la calle es un fenómeno marginal, y en extinción, a excepción de los polígonos industriales. Algo característico de Cádiz es que la edad de las mujeres que se prostituyen es superior a la media, situándose prácticamente en la treintena. La gran mayoría de ellas está en una situación documental reglada. Se contabilizan unas 465 prostitutas y 21 clubs.

CÓRDOBA

En la provincia de Córdoba «los clubs son muy variados, muy organizados, y más sofisticados que en otros territorios interiores y no costeros». El factor más peculiar de Córdoba es que «es una de las provincias con mayor confluencia de nacionalidades distintas por parte de las mujeres ejercientes, ya que hay hasta veinticuatro nacionalidades diferentes, predominando, sobre todas las demás, mujeres de origen latinoamericano». Según cifras aportadas por la Guardia Civil , hay unas 250 meretrices. Según cifras del Defensor del Pueblo Andaluz, 3.810. Según el estudio de mujeres progresistas Córdoba, 243. El número de club, según las anteriores fuentes va de los 15 que fija la Guardia Civil; 254 el Defensor; y 21 las mujeres progresistas.

GRANADA

Granada representa «un modelo menos dinámico» con zonas clásicas y emergentes. Las áreas típicas no aumentan (prostitución de calle) pero tampoco disminuyen; es decir, lo que hay es un proceso de reemplazo. Esta provincia se caracteriza «por tener una menor diversidad de orígenes, siendo la prostitución de mujeres subsaharianas muy escasa». Se apunta a la presencia de mujeres de Europa del Este. Se contabilizan 790 mujeres en el oficio y 30 clubs.

HUELVA

Huelva presenta una situación compleja comparada «con la homogeneidad de los núcleos de prostitución en otras provincias». El volumen de prostitución «varía considerablemente a lo largo del año, incrementándose significativamente durante las campañas agrícolas –de fresa–, tanto por el aumento de mujeres prostituidas como por el aumento de clientes –temporeros– que acuden a la campaña». La prostitución de extranjeras es más reciente y se ha introducido menos rápido. Huelva tiene un alto grado de prostitución abierta, «caracterizada por la presencia tradicional del chulo al más clásico estilo». La provincia junto a Sevilla capital es uno de los territorios donde ha aumentado significativamente la prostitución de calle, pero «más deteriorada y asociada a las drogodependencias». Las campañas agrícolas hacen que «las mujeres del Este que se desplazan a la zona generen un volumen de prostitución muy cambiante». Se calcula que hay alrededor de 300 prostitutas en los 13 clubs contabilizados.

JAÉN

En Jaén «las mujeres tienen una movilidad tanto dentro de la provincia como a nivel interprovincial y estatal». «El empresariado de clubs (y pisos) de Jaén está muy organizado, y emplea bastante a menudo la publicidad local», señala el IAM. Una de sus características es «la contratación por parte de algunos dueños de clubs de servicios médicos a clínicas privadas donde acuden las mujeres para revisar su estado de salud», a costa de las prostitutas. Predominan las mujeres latinoamericanas: cubanas, colombianas, venezolanas, puertorriqueñas, y brasileñas. Se contabilizan unas 600 meretrices y alrededor de 40 clubs.

MÁLAGA

Representa «muy por encima de cualquier otra provincia andaluza, e incluso por encima de muchas zonas del Estado, la máxima sofisticación de los locales y tipologías». La prostitución abierta se limita al contacto en alterne en discotecas y pubs, siendo prácticamente inexistente la de calle a excepción de la capital. La costa es destino de mujeres (y hombres) no organizadas que emigran de forma interior e internacional para ejercer la prostitución en las temporadas de verano, y que se unen a veces a alguna agencia o club de manera temporal. Es destino de redes internacionales (scorts). Gran diversidad de orígenes. Existen pisos y chalets privados, estos últimos funcionan como los clubs y tienen un alto grado de modernización. El sistema de reemplazo por plaza. Destaca mucho la publicidad de la prostitución y el uso de internet a través de páginas web. Es la única provincia andaluza con una clara oferta dirigida a la mujer como cliente, subrayando la idea de «estar acompañada». La cifra media de mujeres en clubs puede rondar las 800, con unos 80 clubs.

SEVILLA

Es el territorio con mayor volumen de prostitución de calle de toda la comunidad; concentrada en la capital aunque bajando por la presión vecinal. Los clubs dominan el resto de la prostitución, por encima de los pisos. La diversidad de orígenes de las mujeres es relativamente escasa. Se calcula que hay 300 prostitutas incluyendo calle y club, aproximadamente 200 extranjeras. Se calculan unos 20 clubs en la provincia hispalense.