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Los padres de Marta del Castillo venden el piso donde fue asesinada su hija

Lo habían comprado para regalárselo al asesino, Miguel Carcaño, a cambio de información sobre el paradero del cadáver, pero no consiguieron nada

Los padres de Marta, Eva Casanueva y Antonio del Castillo, tras la reciente sentencia contra el Cuco, encubridor de Miguel Carcaño, por mentir en el juicio del asesinato
Los padres de Marta, Eva Casanueva y Antonio del Castillo, tras la reciente sentencia contra el Cuco, encubridor de Miguel Carcaño, por mentir en el juicio del asesinatoEduardo Briones / Europa PressEuropa Press

Los padres de Marta del Castillo, Eva Casanueva y Antonio del Castillo, han vendido el piso donde fue asesinada su hija el 24 de enero de 2009. El progenitor de la joven lo había comprado como estrategia para convencer al asesino, Miguel Carcaño, de que le diese información veraz sobre el paradero de la víctima. A cambio de esos datos le ofreció regalarle el inmueble, ubicado en el número 78 la calle León XIII de Sevilla capital, pero ni así consiguió su propósito.

El anuncio de la venta del piso ha sido realizado por el propio Antonio del Castillo en su cuenta de Twitter, en la que ha dado las gracias a los agentes que han participado en la compraventa. “Quisiera con estas líneas agradecer la atención, colaboración y profesionalidad prestada por Tecnocasa Estudio Pío XII-Cruz Roja y Estudio Arroyo-San Carlos en la gestión e intermediación de la venta del inmueble de León XIII. Un fuerte abrazo a Miguel, Enrique y Carlos”, ha escrito.

El inmueble en cuestión es un bajo en el número 78 de la citada calle, situada muy cerca de la Macarena. Después del asesinato de Marta, por impago de la hipoteca, volvió a poder de un banco que a su vez también terminó poniéndolo a la venta. La noticia de que los padres lo habían comprado trascendió a finales de 2021, pero a esas alturas Carcaño ya se había vuelto a negar a dar datos sobre la localización del cadáver de Marta, de ahí que la familia lo pusiera a la venta hace ya meses.

Además de ser el escenario del crimen, el bajo C del 78 de León XIII se convirtió también en noticia porque fue una de las claves de un intento de la familia de la joven por reabrir la investigación contra el hermano de Carcaño, Javier Delgado. Una de las versiones del asesino consistía en que el día del asesinato tuvo una discusión con su hermano por la transmisión de la propiedad y la comisión de un posible delito en la constitución de la hipoteca por la aportación de una documentación falsa. La Justicia, sin embargo, cerró esa puerta al considerar que no había ninguna relación entre ese hecho y la muerte de Marta.