Sevilla arranca una mesa institucional fija con el Gobierno y la Junta

La petición por parte de Sevilla de un status diferente por la capitalidad es un asunto que escuece en otras capitales andaluzas –léase Málaga, principalmente– que entienden que ostentar la sede de las principales administraciones regionales es por sí mismo una diferenciación suficiente y posible motivo de agravio para el resto de provincias. El regidor de Sevilla, Antonio Muñoz, viene reclamando una serie de «contraprestaciones» para la capital andaluza. El jefe del Ejecutivo regional, Juanma Moreno, respondió a la invitación del Ayuntamiento para tratar este y otros asuntos. De momento, Sevilla contará con una mesa institucional fija con la Junta y el Gobierno central para tratar directamente las necesidades de la capital hispalense.

«Nos ha faltado sacar la calculadora», señaló Antonio Muñoz, que habló siempre del marco de «lealtad institucional». El regidor citó como principales acuerdos alcanzados el «espacio de diálogo permanente por la singularidad de Sevilla» entre «Gobierno-Junta-Ayuntamiento» con «medidas extraordinarias para la periferia que deben abordarse en esa mesa», en referencia a las zonas más pobres de Sevilla, que son también las del país. En la mesa también se tratarán los «grandes eventos que demandan más Policía Nacional», así como la necesidad de «acompasar los desarrollos urbanísticos con las infraestructuras». «Esto ya funciona en Madrid o Barcelona», destacó el regidor. También se abordó en el encuentro la candidatura de Sevilla a la Agencia Espacial Española, en base a su experiencia aeronáutica, y la red completa de metro. Muñoz mostró su «satisfacción por el inicio del diálogo».

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, defendió la necesidad de «máxima colaboración» entre instituciones y «la máxima cordialidad» del encuentro. Moreno insistió en que son «objetivos comunes» los abordados. «Sevilla es una de las grandes capitales de Europa y de la comunidad», señaló Moreno, que resaltó que se trata de «una prioridad absoluta escuchar las inquietudes del máximo representante» de la capital para «avanzar lo más lejos y lo más rápido».

Moreno definió la mesa institucional propuesta como «una manera de encauzar el diálogo supramunicipal, a tres bandas» y reiteró los objetivos de mejorar los barrios degradados» y abordar «infraestructuras pendientes, como el metro». «Queremos acelerar al máximo», dijo, y apuntó al objetivo de «hacer obras a la vez» en base a la «cooperación entre instituciones».

Antonio Muñoz se mostró, de momento, prudente «con el alcance de la mesa»: «Hay que hacer que el niño empiece a andar». Juanma Moreno apuntó que «ciertas singularidades» deben ser «canalizadas a través de esta mesa».