XIV Aniversario

Caso Marta del Castillo: una herida abierta 14 años después

Las últimas decisiones judiciales han sumido a los padres en el desaliento, pero el abuelo avisa: «No voy a parar, moriré buscando a mi nieta»

José Antonio Casanueva (c) , abuelo de Marta del Castillo, en la concentración por el 14 aniversario del asesinato de Marta del Castillo. Eduardo Briones / Europa Press
José Antonio Casanueva (c) , abuelo de Marta del Castillo, en la concentración por el 14 aniversario del asesinato de Marta del Castillo. Eduardo Briones / Europa PressEduardo BrionesEuropa Press

«14 años sufriendo, 14 años de martirio». El pesar de la familia de Marta del Castillo se ve reflejado en los ojos su abuelo, José Antonio Casanueva, que ayer volvió a concentrarse ante las puertas del juzgado del Prado de San Sebastián para pedir justicia. Acompañado por unos cuantos amigos y vecinos de la barriada de los Tartessos, Antonio aprovechó el 14 aniversario de la muerte y desaparición de su nieta para exigir que no den carpetazo al caso.

Hace unos meses se decretó la conclusión de la instrucción y archivo de la pieza judicial separada correspondiente a la búsqueda del cuerpo de la joven sevillana. Pero su abuelo avisa de que él no cesará: «Moriré buscando a mi nieta, no voy a parar hasta que Dios me lleve». A los asesinos de Marta les pidió, una vez más, que «digan donde está el cuerpo para poder cerrar un capítulo que está matando a toda la familia». «Los cinco saben dónde está el cuerpo», apostilló, en referencia a los implicados: Miguel Carcaño, autor confeso del asesinato de Marta; su hermano, Francisco Javier Delgado; su novia, María García Mendaro; el amigo de Carcaño, Samuel Benítez, y el joven Francisco Javier García, conocido como «El Cuco».

José Antonio Casanueva fue el único de la familia que participó en los actos que se celebraron por el 14 aniversario de la muerte de Marta del Castillo. Los padres no estuvieron presentes ayer en la concentración convocada ante los juzgados y posterior ofrenda floral, ni tampoco en la rueda de prensa del viernes. El abuelo es el que sigue sacando fuerzas de flaqueza para que no se olvide a su nieta. «A mis 82 años me queda poco camino en la vida, pero no voy a parar de buscar a Marta hasta que Dios me lleve», dijo Antonio, e insistió en que «una mano negra» está entorpeciendo el esclarecimiento del caso.

La familia de Marta intenta a la desesperada que se reabra, pero la Sección Tercera de la Audiciencia da por «concluida la fase de instrucción dado el tiempo de duración de la investigación», en concreto «12 años y once meses», toda vez que deniega la «práctica de nuevas diligencias».

La última estrategia para dar con el paradero del cuerpo de Marta es a través del análisis de los datos en crudo del móvil de Carcaño para saber dónde se encontraba la noche del crimen no ha sado resultado. Esta ha sido la última, pero se ha intentado de todo. La desesperación de los padres llegó al extremo de adquirir el piso en que se produjo el asesinato para ofrecérselo al propio Carcaño si colabora. Finalmente, el pasado año lo vendieron. En 2022 se abrió también otra veta de esperanza con el juicio por falso testimonio a «El Cuco» y su madre. Carcaño estaba citado como testigo pero finalmente no testificó. Este «palo» ha sido definitivo para la familia de la Marta del Castillo, que hoy tendría 31 años.