Cambio climático

Sierra Nevada dejará de estar teñida de blanco a final de siglo

Los escenarios climáticos de la Consejería de Medio Ambiente auguran la práctica desaparición de la nieve en la alta montaña andaluza por el calentamiento global

La falta de nieve, además del impacto ambiental, supondría el fin de determinados deportes de invierno
La falta de nieve, además del impacto ambiental, supondría el fin de determinados deportes de inviernoAgencia EFE

Entre 1961 y 1990, en un tercio del territorio andaluz nevaba más de un día al año. En general, los territorios a una altitud superior a 700 metros sobre el nivel del mar reciben una nevada al año de promedio. El calentamiento global, cada vez más acusado en la región andaluza, puede cambiar esta dinámica hasta hacer desaparecer la nieve del territorio de forma permanente.

Un informe de la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul sobre la evolución de los escenarios de cambio climático señala que «en general puede extraerse que en las Sierras de Cazorla, Segura y las Villas, así como en Huétor y Baza tanto los escenarios más optimistas como los más severos prevén una disminución de la precipitación en forma de nieve de casi el 100% para el periodo 2041-2070, así como para final de siglo». Además, «durante dicho periodo las cotas altas de Sierra Nevada seguirán registrando precipitaciones significativas (entre 200 y 300 mm anuales), reduciéndose, no obstante, a menos de la mitad de lo registrado en el periodo 1961-1990», que es el escenario desde el que se parte. Así las cosas, para final de siglo «los más optimistas prevén que Sierra Nevada continúe registrando entre 200 y 300 mm anuales y, por el contrario, los más pesimistas auguran la práctica desaparición de la nieve en la alta montaña andaluza». El estudio señala que «si bien estos escenarios no significan que las precipitaciones en forma de nieve vayan a desaparecer por completo, sí disminuirán de forma significativa su ocurrencia y su permanencia (comenzando primero por cotas medias a mediados de siglo, para acabar por las cotas más altas por encima de 2000 metros en el último período) provocando un severo impacto medioambiental en la biodiversidad local y, por consiguiente, poniendo en peligro la continuidad de ciertas especies de fauna y flora locales así como determinados deportes de invierno».

El informe publicado pro la Junta de Andalucía está basado en el análisis de la evolución futura bajo escenarios de cambio climático de las variables climáticas y sus derivadas, adaptados al sexto informe del grupo intergubernamental de expertos sobre el cambio climático (IPCC). El mismo que vaticina que la temperatura media máxima anual en Andalucía podría llegar a ser «superior a los 30ºC».

El instrumento general de planificación estratégica en Andalucía para la lucha contra el cambio climático, que se deriva de la Ley 8/2018 de cambio climático de Andalucía, es el Plan Andaluz de Acción por el Clima (PAAC), aprobado el 13 de octubre de 2021. Su misión es integrar el cambio climático en la planificación regional y local, para a la vez alinearlas con los planes del gobierno de España, el Pacto Verde Europeo y el Acuerdo de París, contribuyendo a alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados por la Agenda 2030 de Naciones Unidas. El PAAC establece 6 objetivos estratégicos a 2030, 12 objetivos sectoriales y más de 137 líneas de acción distribuidas en tres Programas: de Mitigación y Transición Energética, de Adaptación y de Comunicación/Participación, que se desarrollarán en sus despliegues operativos con horizonte 2026 y 2030. El Programa de Mitigación de Emisiones tiene por objeto establecer las estrategias y acciones necesarias para alcanzar el objetivo de reducción de emisiones. El Programa de Adaptación persigue Orientar y establecer la programación de actuaciones de adaptación al cambio climático de la sociedad andaluza, el tejido empresarial y productivo andaluz, la Administración de la Junta de Andalucía y las entidades locales. Y el Programa de Comunicación y Participación tiene por objeto fomentar las acciones de información, formación y corresponsabilización.