Elegante animal

Giro en el tiempo, y no por la AEMET: un refrán aragonés da las claves para salvarse de este chaparrón

El refranero aragonés te propone que montes en un majestuoso caballo si el cielo está gris en el Moncayo

Caballo
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El refranero aragonés nunca nos dejará de sorprender. Además de contar en su haber con varios refranes populares que tienen como protagonistas a animales del campo como las gallinas - supuestamente predicen el tiempo en ‘Si se revulcan as gallinas ya tiens l'agua encima’- también cuenta con otro muy peculiar, del que es protagonista un animal tan majestuoso y elegante como el caballo.

A un animal tan distinguido no le pega revolcarse por los suelos o realizar otro comportamiento indigno con el que predecir el panorama atmosférico en la comunidad aragonesa, pero sí que es un digno compañero con el que salir raudo y veloz si hay amenaza de lluvias por la zona del Moncayo, popular montaña de la cordillera ibérica ubicada entre las provincias de Zaragoza y Soria.

Sobre Cillo en Moncayo, ponte a caballo

Así pues, ‘Cillo en Moncayo, ponte a caballo’ significa justo eso: si el cielo está encapotado o tormentoso, vuelve a tu casa rápidamente porque lo que se viene es un chaparrón considerable. Y es que entre montañas es mucho más fácil predecir las lluvias que en campo abierto, sin necesidad de ‘Oír cantar a las ranas" como "buena señal de agua’.

Este segundo refrán aragonés, 'Oír cantar las ranas, buena señal de agua' que se cumple principalmente en zonas acuosas -ríos, lagos o estanques- es tan definitorio como el de ‘Si se revuelcan las gallinas ya tienes el agua encima’ o ‘Cuando la corneja -un pájaro de apariencia similar a la del cuervo- va rasante, ponte bufanda y guantes’. Pero el imaginario propio de las ranas es muy amplio en el refranero de Aragón. ‘Cuando las ranas veas brincar coge la caña y ves a pescar’ es otro, que no hace falta ni explicar.

Nubes de mosquitos, agua prontito

Y, con el agua, también tiene que ver este último refrán que tan popular es en los pueblos de Huesca, Zaragoza y Teruel. Aunque, excepcionalmente, no se trata de un animal mamífero. Su protagonista es un insufrible insecto, muy pesado durante los meses de verano. ‘Nubes de mosquitos, agua prontito’, reza la expresión de matices también meteorológicos.

En este caso, el refrán mencionado habla de un cambio de tiempo muy frecuente durante la época veraniega. Las conocidas 'nubes de mosquitos', que se producen cuando revolotean cientos de estos al mismo tiempo conformando una especie de nube negra, anuncian -según el sabio dicho aragonés, de épocas pasadas- la llegada de lluvias o incluso una posible bajada de temperaturas.

La cultura popular del refrán, basada en los aprendizajes de quienes han trabajado duro en el campo y han podido analizar el comportamiento de la naturaleza y el cielo, es y será siempre brillante pese a no estar basada en hechos científicos o datos empíricos. Y, sino, que alguien contradiga verdades como estas: 'Amor y viento, por uno que se va vienen ciento'. ¿O no?