El restaurante de Zaragoza que te transportará a la cabaña del Hobbit: hay un bosque mágico, un lago y una cascada

El Señor de los Anillos y el Hobbit son ambas obras excepcionales ambientadas en el mismo universo. Criaturas mágicas, bosques encantados, reinos, castillos y misterios de la mitología, abundan en el mundo de J.R.R. Tolkien. Pero, ¿qué tal si existiera una manera de llegar a Tierra Media mientras disfrutas de una deliciosa comida? En Zaragoza, el restaurante Voltereta Nueva Zelanda abre sus puertas para regalarnos esta experiencia.

Además de escenarios sacados del Señor de los Anillos y el Hobbit, Voltereta es la embajada gastronómica de Nueva Zelanda en España, especialmente en la capital aragonesa. Nació como un emprendimiento de los hermanos Calvo, de Valencia, y su padre, el fundador del grupo Saona, que también tiene presencia en Zaragoza. Aunque existe desde agosto del año pasado, no contaba con la licencia urbanística ni la de funcionamiento, necesarias para abrir un local de ese calibre, y así se tuvo que postergar la apertura oficial hasta septiembre de este año.

¿Dónde está ubicado Voltereta Nueva Zelanda?

El restaurante en cuestión está ubicado en un espacio céntrico en el número 4 de la calle La Salle, junto a Santa Teresa de Jesús. El espacio cuenta con un entono natural único, un bosque, una cascada, un lago y ese ambiente misterioso característico de los libros y películas de fantasía. Las mesas se encuentran ubicadas entre cabañas como las del Hobbit con chimeneas y muebles. De hecho, para entrar, es necesario pasar por una puerta secreta que te lleva por una cueva iluminada.

Los precios del restaurante Voltereta Nueva Zelanda

Este nuevo restaurante en Zaragoza ofrece una variedad de "pequeños bocados" que oscilan entre los 4,5 y 6,5 euros. Destacan platos como las croquetas de pato teriyaki y las gyozas de rabo de toro, opciones innovadoras para empezar. Los entrantes, que varían de 6,5 a 12 euros, incluyen propuestas como ensaladilla con tartar de atún rojo y piparra encurtida, o huevos rotos con atún rojo sobre una base de patatas fritas.

Entre los platos principales, los comensales podrán disfrutar de opciones que van desde unos noodles kimchi con huevo a baja temperatura, cacahuetes y un toque picante por 8,5 euros, hasta un solomillo de ternera con foie caramelizado al Pedro Ximénez por 20,5 euros, servido sobre un cremoso puré de patata. Para el postre, la carta ofrece varias opciones por 5,5 euros, entre las que destaca la tarta de filipinos y chocolate blanco.

La carta también incluye una amplia selección de vinos locales y de autor, con énfasis en denominaciones de origen aragonesas. Además, se ofrece una sección infantil con platos accesibles que oscilan entre los 4,5 y 6,9 euros, junto con infusiones variadas para complementar la experiencia gastronómica.