El pueblo de colores con casas colgadas más visitado de Asturias

Se vende como azul y verde y es verdad. En el corazón de Asturias hay un pueblo tan pintoresco como especial que además, es sin duda uno de los más fotografiado de Asturias.

No hay campaña publicitaria que se precie que no ponga en su portada una foto de este lugar, en donde además se pueden comer los mejores pescados y mariscos de Asturias.

Sus casas colgadas cuesta arriba, sus paredes de colores, sus laberinto paras callejear, su puerto pesquero con sus lanchas y barcos amarrados, sus calles empinadas... todo ello, le confieren un encanto especia. Si visitas Asturias no puedes dejar de visitarlo.

Descubierto el misterio... el pueblo es Cudillero.

La villa de Cudillero comenzó a habitarse en el siglo lX, cuando los primeros habitantes se asentaron a vivir en esta zona. Los habitantes del concejo se conocen como "cudillerenses" pero los de la villa son "pixuetos".

En Cudillero se mantienen vivas muchas de las tradiciones más bonitas de Asturias como, por ejemplo, "los cancios de chigres". Es común y frecuente encontrarse con grupos de personas que todos los días aprovechan para cantar canciones asturianas en los bares, mientras disfrutan de una sidra. Muchas de esas canciones están ligadas a la tradición pesquera y marinera de la villa.

Además de lo pintoresco de la capital, también se pueden visitar obras y conjuntos de gran valor artístico y cultural: la soberbia quinta de los Selgas en El Pito, las casas de arquitectura indiana, el mirador de La Garita, la Casa del Fuego o la ermita de Santa Ana de Montarés.

Lo que tampoco se puede hacer es pasar por Cudillero sin disfrutar de la gastronomía local, donde se pueden probar los mejores pescados y mariscos de Asturias. Además, la villa dispone de varias tiendas en las que se pueden comprar todo tipo de productos típicos de la gastronomía asturianas como quesos, licores, sidra, embutidos, miel...

En el Cabo Vidio, uno de los enclaves más bonitos del concejo, se ha colocado un banco donde se puede ver atardecer o amanecer, disfrutando de todo el esplendor de la costa cantábrica y el mar.

En sus locales de hostelería se sirven los mejores mariscos y pescados de roca, esos que no suelen aparecen en las cartas de los lugares convencionales. Si se visita Cudillero hay que aprovechar la ocasión para comer aquellos productos que no se encuentran nada fácil. Otro de los manjares típicos de Cudillero son las natas vaqueiras.