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«No era capaz de trabajar porque no soportaba mirar hacia la pantalla»

«Cuando instalé el filtro en mi teléfono móvil y en mi ordenador, me cambió la vida», cuenta Consuelo, traductora que pasaba más de 12 horas delante del ordenador, no podía trabajar debido al terrible dolor de ojos producido por el uso de pantallas. La experiencia real con los protectores oculares Reticare puede servir a muchas más personas a darse cuenta de la importancia de protegerse los ojos

«No era capaz de trabajar porque no soportaba mirar hacia la pantalla»
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Apenas podía trabajar ni era capaz de estar más de 15 minutos mirando la pantalla. En los últimos tiempos su situación había cambiado a peor. Muchos pensarán que nunca les sucederá nada parecido, pero con el número de horas que se pasan frente a las pantallas todo apunta a lo contrario». Consuelo empezó a tener migrañas oftálmicas más frecuentemente de lo habitual y tras un episodio crítico decidió ir al oftalmólogo quien le dijo que no padecía problemas físicos a nivel de la retina y que su graduación era buena. Sin embargo, Consuelo era incapaz de mirar la pantalla de su ordenador sin que le dolieran los ojos. Ten en cuenta que mañana esto podría sucederte a ti.

«Era como si me enfocaran los ojos con una linterna en una habitación oscura», aseguraba. Apenas podía trabajar, y entonces llegó la incertidumbre sobre el futuro. «Soy feliz con mi trabajo, muchísimo, pero tengo “solo” 45 años, y si no era capaz de trabajar porque no soportaba mirar hacia la pantalla, ¿qué iba a hacer?» Tras un paréntesis vacacional y con «el miedo sobre lo que iba hacer en el futuro», Consuelo descubrió por casualidad Reticare en una visita a unos grandes almacenes. Producto que le llamó la atención. A su regreso a la vida cotidiana en su ciudad de residencia, Paris, empezaron de nuevo las migrañas oftálmicas.

En ese momento, Consuelo recordó Reticare y lo compró por internet. «Sólo puedo decirle que cuando instalé el filtro en mi teléfono móvil y en mi ordenador, me cambió la vida, pero literalmente... Se acabó ese dolor al mirar la pantalla. Se acabaron mis dudas sobre mi futuro profesional».

Como Consuelo, miles de personas pueden ya estar padeciendo esta situación sin saber qué hacer. Este tipo de casos aparecen cada vez más y estamos observando una aceleración en la detección de personas que son incapaces de trabajar con las nuevas pantallas. Recuerda, que además de estos síntomas, la luz de alta energía está relacionada con los trastornos del sueño y su exposición prolongada, es un factor de riesgo para la degeneración macular.

Dos años

Han transcurrido dos años desde la creación de Reticare y su madurez queda patente por el número y calidad de sus clientes. Ya se acercan al cuarto de millón las personas que confían en Reticare. Pasado ya claramente el debate acerca de si la luz de las pantallas puede afectar a nuestra visión - existen fabricantes de pantallas que ya lo han corroborado públicamente - Reticare se convierte en la medida de prevención que necesitamos. Los últimos experimentos de la Universidad Complutense de Madrid demuestran que la protección más eficaz pasa por aplicar Reticare a la pantalla ya que de esta forma reducimos la cantidad de luz de alta energía que llega a nuestros ojos.

Cada día aparecen nuevos casos de personas que no pueden trabajar por la intensidad de la luz de las pantallas, sobresale entre todos el de Consuelo, una traductora de 45 años que ya no podía trabajar frente a pantallas y después de instalar Reticare vuelve a hacerlo con normalidad. También, el reconocido periodista Jake Wallis de Daily News, que ya escribió un artículo que ha dado la vuelta al mundo contando su experiencia personal con las pantallas, antes y después de colocar Reticare. Jake Wallis destacaba: «cuando empecé a probar uno de los filtros Reticare, me di cuenta que los síntomas que tenía hasta entonces, dolor de cabeza, vértigo y náuseas, se redujeron en todos los dispositivos, al colocarlo»

Estamos asistiendo a los efectos de una exposición muy intensa a este tipo de luz. Esta es la razón por la que cada día se hace más necesario aplicar un protector ocular a las pantallas y no pasar por experiencias como las anteriores. Desde Reticare estamos detectando un aumento importante de la cantidad de personas que cada vez tienen síntomas más intensos: Dolores de cabeza, picor de ojos, quemazón, enrojecimiento, trastornos del sueño asociados a la melatonina, hipersensibilidad a la luz, ... Son síntomas que crecen hasta el punto que, en determinados casos, pueden provocar mareos e impedir el uso normal de las pantallas de los nuevos dispositivos. De hecho, si sabemos observar nuestros ojos cuando leemos sobre una pantalla, enseguida detectaremos que algo no funciona como debe, que la cantidad de energía es excesiva y que los niveles de exposición también.

El principal enfoque de Reticare está en reducir la luz de alta energía emitida por las pantallas y esto trae consigo la prevención de los riegos para la retina, principalmente la prevención de la degeneración macular. Sin embargo, al reducir la cantidad de energía que llega al ojo, los usuarios experimentan una disminución, o desaparición completa, de los síntomas de fatiga visual digital.

Son muchas las personas que en los últimos dos años nos han felicitado, apoyado y animado a seguir investigando. Cada vez son más los usuarios que utilizan Reticare en todas sus pantallas (sus tablets, sus monitores, sus smartphones) asegurando unos niveles de protección mucho mayores que aquellos que sólo protegen uno de sus dispositivos. Y para todos a los que amamos la tecnología, con Reticare no solo reducimos riesgos de patologías oculares sino que aumenta considerablemente el confort visual al utilizar los dispositivos.