España

¿Cómo actuar ante la mordedura de una serpiente?

En la Península Ibérica se localizan 13 especies de ofidios, que cada año ocasionan 140 mordeduras que requieren atención sanitaria

Imagen de archivo de una serpiente
Imagen de archivo de una serpientelarazon

Aunque las mordeduras de serpientes son poco frecuentes, siguen siendo una de las urgencias que se atienden en nuestro país. De hecho, cada año 140 personas requieren asistencia sanitaria por el mordisco de un ofidio, frente a los 8.000 casos que se registran en el continente europeo.

Con estas cifras, la Fundación Ambuibérica, que recuerda que en la Península Ibérica existen 13 especies diferentes de ofidios, en concreto de las familias de los vipéridos y de los colúbridos, quiere llamar la atención de la población sobre los grados de envenenamiento, sus manifestaciones sistémicas y qué hacer en caso de mordedura de serpiente.

¿Qué hacer?

En el caso de que una persona sea mordida por una serpiente, la Fundación Ambuibérica recomienda seguir los siguientes pasos:

> Intentar tranquilizar a la víctima

>Evitar que la víctima se mueva o que realice movimientos de la zona afectada, que deberá mantenerse por debajo del nivel del corazón para reducir el flujo del veneno

>Llamar a los servicios de emergencia (112)

>Retirar cualquier objeto que pueda oprimir la zona afectada (reloj, anillo, pulsera...)

> Si fuera posible, tomar nota de la forma, el tamaño y el color de la serpiente

¿Qué no hay que hacer?

Entre las acciones que la Fundación Ambuibérica aconseja que no se hagan en ningún caso están las siguientes:

>No recoger la serpiente ni intentar atraparla, aunque la hubiese matado, pues puede morder, por reflejo, aunque lleve varias horas muerta

>No permitir que la víctima realice esfuerzos

>No aplicar torniquetes pues pueden provocar gangrena

>No cortar la zona de la mordedura, pues se pueden originar infecciones y sangrado persistente

>No succionar la zona afectada, pues nos podemos envenenar también

>No aplicar hielo para reducir la hinchazón o el dolor, pues puede necrosar los tejidos

>No suministrar a la víctima nada por vía oral, ni tampoco aspirinas o antiinflamatorios

>No elevar la zona mordida por encima del nivel del corazón de la víctima

Grados de envenenamiento

Existen cuatro grados.

1. El más leve es el grado 0, en el que no existe envenenamiento, pero sí las marcas de los colmillos del reptil y un ligero dolor.

2. En el grado 1 se produce un envenenamiento ligero y, además de las marcas del animal, un dolor intenso y edema local.

3. Cuando se diagnostica un grado 2 se está ante un envenenamiento moderado, con edema progresivo, dolor intenso y manifestaciones sistémicas (hipotensión, náuseas, vómitos, mareos y diarreas).

4. Por último, el grado 3 da cuenta de un envenenamiento grave, edema en la extremidad, dolor muy intenso y una sintomatología sistémica grave (fracaso renal agudo, insuficiencia respiratoria, shock, trastornos neurológicos y coagulación intravascular).