Epidemias

El contagioso virus estomacal al que casi nadie presta atención

El norovirus infecta cada año a 865 millones de personas, y se contagia sobre todo en guarderías, cruceros y residencias de ancianos

El norovirus visto al microscopio
El norovirus visto al microscopiolarazon

Cruceros, hogares de ancianos y guarderías son los lugares de reproducción más comunes de norovirus, un contagioso virus estomacal que infecta a 685 millones de personas en todo el mundo cada año, pero, a pesar de su prevalencia, el norovirus --que no tiene tratamiento específico y es particularmente peligroso en lactantes y ancianos-- ha recibido poca atención por parte de los investigadores.

Según recoge Europa Press, en un artículo de revisión publicado este martes en ‘Trends in Molecular Medicine’, científicos de la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington y sus colegas en la Escuela de Medicina de la Universidad de Michigan, ambas en Estados Unidos, analizan lo que se sabe sobre el virus.

1. Las personas puede diseminar el norovirus durante meses

El norovirus tiene una alta tolerancia a los desinfectantes y con un promedio de 1,2 días de periodo de incubación, puede propagarse rápidamente. Aunque los síntomas como dolor abdominal, náuseas, vómitos y diarrea normalmente se resuelven dentro de entre 1 y 4 días, también es posible que una persona disemine el virus antes de que los síntomas aparezcan y después de su resolución. La replicación viral puede ocurrir hasta durante unos pocos meses en individuos sanos y durante años en pacientes inmunocomprometidos. La gravedad de los síntomas no se correlaciona con la replicación del norovirus, lo que dificulta la protección contra el virus.

2. Si vives en una zona activa de norovirus, lávate las manos

El norovirus prospera en áreas públicas abarrotadas y los brotes se propagan cuando las personas comen o beben alimentos contaminados, tocan superficies infectadas o entran en contacto con alguien que tiene el virus. «El norovirus es extremadamente contagioso y, por lo tanto, lavarse las manos con frecuencia es importante», dice la coautora de la revisión, Megan Baldridge, una médico que estudia patógenos y el microbioma en la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington en St. Louis. «Si comienza a sentir síntomas, evite preparar alimentos para otras personas y tenga cuidado de limpiar cualquier superficie que pueda estar contaminada con lejía», aconseja.

3. Algunas personas son más susceptibles a los norovirus que otras

Hay muchos tipos diferentes de norovirus y las personas pueden ser infectadas varias veces durante sus vidas. La infección es diferente para cada especie que está infectada por el virus y la manera en la que los seres humanos reaccionan al virus depende de sus genes. «Las personas más saludables pueden contraer el virus y tener síntomas incómodos y desagradables durante unos días, pero esos síntomas se resolverán rápidamente --explica Baldridge--. Lo que puede suceder con las personas inmunocomprometidas es que pueden tener una infección crónica debilitante que puede ser altamente perjudicial».

4. El norovirus puede desencadenar otros problemas intestinales

Se ha señalado al norovirus como un posible desencadenante de otras enfermedades intestinales, incluyendo el síndrome del intestino irritable (IBS, por sus siglas en inglés) y la enfermedad inflamatoria intestinal (IBD, por sus siglas en inglés). Bajo ciertas condiciones, la infección por norovirus también puede alterar las bacterias intestinales residentes normales y permitir que se produzcan otras infecciones. Aunque que se debe hacer mucha investigación con respecto a las causas de las diferentes patologías intestinales, sabemos que varios patógenos pueden afectar a la forma en que el virus reacciona y estas reacciones pueden desencadenar otros problemas intestinales. «Estamos empezando a entender cómo existe una interacción muy compleja entre la infección por norovirus y todos los otros patógenos y las bacterias comensales que podrían estar presentes --relata Baldridge--. Estos factores probablemente tienen interacciones muy complejas con el intestino».

5. No hay vacuna, pero sí nuevas estrategias en el horizonte

La investigación de vacunas y tratamientos ha sido limitada por la falta de comprensión del norovirus en humanos, pero descubrimientos recientes en ratones han identificado que ciertos factores biológicos pueden ralentizar o matar el virus. «Hasta ahora las vacunas han estado utilizando exclusivamente partículas virales, pero algunos nuevos desarrollos pueden hacer posible generar una vacuna viva atenuada, lo cual es bastante emocionante --subraya Baldridge--. Tener modelos animales y modelos de cultivo celular para cultivar el virus y estudiar cómo actúa un poco más de cerca nos ayudará a entenderlo mejor y pensar más en las estrategias de vacunación».

EP