Las plantas medicinales, un remedio alternativo

Afecciones como molestias de garganta, dolores de espalda o la ansiedad pueden tratarse con la fitoterapia o herbolaria, que elabora medicamentos a partir de plantas y árboles.

No es casualidad que tomemos caramelos de eucalipto cuando nos duele la garganta o que el suavizante para la ropa que utilizamos tenga un relajante olor a lavanda: una gran cantidad de plantas, flores y árboles pueden utilizarse con un objetivo terapéutico. De eso se encarga la fitoterapia o la herbolaria, una disciplina milenaria que se utilizaba ya en tiempos del imperio Sumerio, hacia el 3000 aC.

La fitoterapia consiste en utilizar aquellos vegetales que contienen principios activos, es decir, compuestos químicos con aplicación farmacológica, para producir fitofármacos. Estos medicamentos naturales provienen de plantas que se cultivan o recolectan tanto en la tierra como en el mar.

¿Quién puede tomarlos?

Los fitofármacos no son aptos para todo el mundo. Desde el punto de vista de los consumidores, los fitofármacos no deben diferenciarse de los medicamentos convencionales: la empresa que los comercialice debe detallar las indicaciones y contraidicaciones de cada producto, además de la fecha de caducidad. Los preparados basados en plantas son aptos para el consumo infantil, según la Agencia Europea del Medicamento, que garantiza la eficacia de plantas como el plantago (que ayuda a combatir el estreñimiento) o el hammamelis (para curar los golpes).

Los tratamientos más comunes

El dolor de garganta es una de las afecciones que se puede tratar con fitofármacos. Según un informe del Centro de Investigación sobre Fitoterapia (Infito), ocho de cada diez españoles sufrió molestias de garganta en 2013. Para prevenir estas afecciones, Infito recomienda "una alimentación equilibrada, ejercicio y preparados farmacéuticos de origen natural, como la echinácea y el própolis".

Las digestiones pesadas y los empachos son otras afecciones que, según Infito, pueden tratarse con medicamentos elaborados con plantas medicinales. El cardo mariano, por ejemplo, ayuda a eliminar toxinas y a depurar el organismo gracias a la silimarina, un componente del cardo con propiedades antioxidantes y que ayuda a prevenir la inflamación.

Bondades de algunas plantas

Según el Manual de Fitoterapia de Soria Natural, estas son las bondades de algunas de las plantas medicinales más conocidas:

- Las hojas de la alcachofa se recomiendan para la alimentación de los diabéticos por alto contenido en inulina.

- Las semillas de la calabaza, mondadas y trituradas, son indicadas para vejigas irritables, molestias de próstata y parásitos intestinales.

- Las hojas de las ramas viejas del eucalipto combaten las infecciones urinarias y las afecciones respiratorias como la faringitis o la sinusitis.

- La flor de lavanda calma el nerviosismo, la ansiedad, el insomnio y el asma.

- La melisa es la base de fitofármacos de uso externo para tratar los herpes, las heridas, las picaduras de insectos, las contusiones y las lumbalgias.

- Las hojas y las flores de la pasiflora se utilizan en casos de contracturas musculares, trastornos menopáusicos, hipertensión y ansiedad.