Solomillo asado con piña y jamón

Una combinación apetitosa, sencilla y sabrosa. La piña, igual que la manzana, casa muy bien con la carne de cerdo y el pollo. Es, además, una receta ligera y nutritiva. La carne de cerdo es una carne a la que le va casi todo y, muy bién, todos los acompañamientos dulzones. Puede decirse de esta receta que ya es un clásico, aunque no pasa de moda.

Esta es una receta que me trae muy buenos recuerdos ya que mi madre solía elaborarla y, siempre, me fascinaba. Va por ti.

INGREDIENTES ( 4 PERSONAS)

2 solomillo de cerdo

200 grs. de jamón ibérico

8 rodajas de piña natural

Zumo de piña natural

1 c.s. de vino de jerez

Sal

Pimienta

ELABORACION

Salpimentar los solomillos.

Dorar los solomillos en una sartén con aceite de oliva. Reservar.

Cortar las rodajas de piña en trozos regulares.

Cortar el jamón en tacos pequeños. Reservar 2 lonchas enteras.

Saltear los trozos de piña en la misma sartén. Añadir los tacos de jamón

Añadir el vino de Jerez y flambear.

Colocar los solomillos en una cazuela de horno.

Tapar con las dos lonchas enteras de jamón que has reservado.

Añadir los trozos de piña y jamón.

Añadir un poco de agua.

Hornear a 180º durante unos 25 minutos.

Retirar del horno.

Reducir en una sartén pequeña la salsa resultante.

MORDISQUITOS

El hecho de dorar primero los solomillos en una sartén es para conseguir sellar la carne y que cuando los hornees no pierdan sus jugos y no se saquen. También consigues que tengan un bonito color dorado.

Para que la salsa quede con una textura agradable debes reducirla a fuego fuerte unos minutos, como te indico más arriba.

Puedes acompañar esta receta con unas patatas asadas o panadera. También con un poco de arroz blanco cocido.

Par conseguir las rodajas sin el corazón utiliza un aparato específico para ello, que venden en cualquier tienda de cocina, es muy sencillo.

Ya ves que es una receta súper sencilla y muy impactante. Atrévete a elaborarla para ti y tu familia. Disfrutareis mucho.

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