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¿Es cáncer? Cuando cada segundo cuenta

Ante la menor sospecha de malignidad, se activa un circuito de atención rápida que permite acortar los plazos de las pruebas y una valoración médica por parte del especialista en menos de 15 días.

¿Es cáncer? Cuando cada segundo cuenta
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Tanto si acudimos a la consulta para una revisión rutinaria como ante la sospecha de que algo pueda no ir bien, nada ni nadie nos prepara para el momento en el que nuestro médico nos dice que hay algo que le genera dudas, que no tiene del todo buen aspecto y que convendría realizar algunas pruebas para descartar posibles patologías como un cáncer. Cáncer. Una palabra que, si bien es cierto que los índices de mortalidad han descendido notablemente en los últimos años gracias a los últimos avances en diagnóstico y tratamiento, sigue siendo maldita y despierta en el paciente ansiedad, angustia y temor ante el abanico de posibilidades que pueden resultar de dichas pruebas.

Ante esto, la espera de los resultados y del consiguiente tratamiento no sólo resulta determinante para el éxito de la recuperación, sino que puede resultar un auténtico infierno que impacta brutalmente en la calidad de vida de los pacientes. Trabajar en equipo desde el primer momento resulta vital para el equipo asistencial.

Para este tipo de casos, el Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz tiene en funcionamiento y en pleno vigor un sistema de alerta para la detección de pacientes con riesgo de malignidad y un circuito de atención rápida ante sospecha de la misma.

Se trata de un protocolo basado en el llamado Código C-15, impulsado por la Comunidad de Madrid, para la citación de cualquier paciente ante una sospecha de malignidad en el plazo de 15 días, pero que la Fundación Jiménez Díaz “ha ampliado y mejorado para su extensión intrahospitalaria a cualquier consulta del hospital o de Atención Primaria desde sus centros de especialidades de Pontones y Quintana”, explica el Dr. Javier Dodero, director de Continuidad Asistencial de la Fundación Jiménez Díaz.

Así, cualquier sospecha de malignidad detectada en cualquier servicio hospitalario o consulta de Atención Primaria en cualquier paciente atendido, ya sea a través del servicio sanitario público como de su aseguradora sanitaria, pone en marcha un circuito de alertas dentro del hospital que activa la realización rápida de pruebas hasta llegar a un diagnóstico en menos de 15 días. El objetivo, que se cumple desde la puesta en marcha de este circuito, es “acortar el tiempo de citación para todas las pruebas y la valoración médica por parte del especialista”, lo que se traduce en un “diagnóstico más precoz, la instauración del tratamiento, si procede, en fases más iniciales de la patología, y unos resultados potencialmente mejores al haberse iniciado el abordaje de forma más temprana”, explica el Dr. Jesús García-Foncillas, director del Departamento de Oncología de la Fundación Jiménez Díaz y de su instituto oncológico, OncoHealth.

“Ésta es una práctica clínica instaurada en todos los servicios del hospital y aplicable a todos los pacientes del mismo, así como a los centros de Atención Primaria”, confirma por su parte el Dr. Dodero, insistiendo también en los beneficios que supone para el paciente el acortamiento de los tiempos de espera en términos de preocupación y ansiedad, añadidos a los derivados en materia de salud.

El circuito incluye los compromisos de citar en el servicio correspondiente, solicitar, programar y realizar las pruebas necesarias, y citar de nuevo en consulta para evaluar el resultado de las pruebas solicitadas para el diagnóstico definitivo dentro del citado plazo de 15 días. Adicionalmente, si el diagnóstico de malignidad se confirma, el circuito contempla la programación de cirugía o citación para primera consulta en quimioterapia u Oncología en el plazo de 10 días.

En conclusión, cuando hablamos de cáncer, además de contar con la mejor tecnología de vanguardia y los profesionales más especializados, es, además, necesario el compromiso del trabajo en equipo para que el paciente sepa que desde el primer momento, todos trabajan tanto su salud como por su calidad de vida.