Los charcos

Me acerqué hasta la Redacción del diario la Razón a donde conseguí arrastrarme por fin a pesar del calor, para llegar a tiempo de ver el plató de la televisión del periódico, y a Almudena Negro hacer una entrevista sobre la gestación subrogada.

La contertulia, periodista de familia, era sin lugar a dudas contraria a la gestación por sustitución, y prefería hablar de maternidad subrogada.

Expuso sus razones y no voy a entrar en debate por un elemental “fair play”, no podemos argumentar ni contrargumento recíprocamente, y creo que vivimos en un país en el que o se sobreactúa discutiendo o se convierten las discusiones sanas en monólogos insanos. Discutir es sano porque es la forma de resolver las contradicciones y avanzar, Marx dixit, y yo sigo al maestro filosofo.

Estuvimos después los tres tratando de sobrevivir tomándonos refrescos fríos y surgió en la tertulia el tema de la relación entre adopciones y gestaciones sustitutorias, ya sean altruistas ya lo sean retribuidas.

Almudena es periodista, supongo que tiene la deformación profesional y el acierto, de buscar lo sucinto o el titular, fue ella la que habló de los continuos “charcos” en los que nos metemos cuando hablamos de derecho de familia, o de la familia sin más. Creo recordar que se refería a que aún no estábamos sacando adelante adecuadamente las cuestiones relacionadas con la adopción, y ya nos estábamos metiendo en otro “charco” con el tema de la gestación por sustitución. Es cierto, así es, nos estamos olvidando de los problemas de la adopción de menores, y en especial de las adopciones de menores mayores. Tenemos ahí todas las cuestiones también relacionadas con la mercantilización del problema, como los gastos de la adopción internacional, las dificultades para conseguir la idoneidad de los progenitores, la “Kafhala” marroquí, las restricciones de los países exportadores de niños, las negativas de los progenitores a las adopciones de niños de mayores..,

Ese mismo día yo había publicado una entrada en el blog del periódico, en la que me mostraba abiertamente partidario de la gestación por sustitución. Transmitía una cierta paradoja de que fuese la izquierda socialista la que fuera contraria a la gestación por sustitución, pero estaba claro por la conversación que habría que distinguir dos elementos, uno el hecho en sí de la gestación y otro los supuestos indicados o permitidos, los limites.

Todo es una cuestión de límites en el derecho de familia, pues se mueve en los terrenos del límite de la evolución humana en el grupo primario de integración y soporte social.

El Derecho de familia como Derecho del límite.

Es cierto, Almudena tenía razón: nos estábamos metiendo un “charco” antes de resolver otros temas. Ahí se quedó la tertulia, terminamos hablando de libros y de futuras entrevistas para la televisión de la Razón y con una invitación a venir a Bilbao a hacer pádel surf en la ría, que hoy me veo obligado a retirar al haberse detectado vertidos y alguna enfermedad de piel en usuarios deportistas. Mantengo la invitación, pero no el “pádel surf”.

Días después, Albert Rivera, opinó, en términos políticos en relación con un proyecto de ley de Ciudadanos para la regulación de la gestación por sustitución.

El mundo al revés, la derecha legislando sobre el tema, y la izquierda diciendo que no.

Yo pensaba que el progreso venia de la izquierda y no de la derecha, pero está todo tan raro, todo es tan cambiante y populista cuando el objetivo es conseguir como sea presidencias de gobiernos, me refiero a Grecia, que lo que vivimos es tal laberinto que sería un juego para el Minotauro.

Bueno, se cambiará de criterio y aquí no habría habido más que un sueño, incluso no habrá sido dicho o yo pasaba por ahí y no sabía nada, como no ha pasado nada con la corrupción en el PP y Cristina Cifuentes y Cospedal hablan del tema como si fuese algo de otro partido. Ya he dicho que se sobre actúa.

Será como una ilusión y tan tranquilos...

Así que quedémonos en que, estamos ante un hecho imparable que ha de ser legislado a pesar de que tenemos otros charcos que deberemos resolver, y que habrá que debatir sobre los límites.

Si hace muchos años cometí el error de juzgar a las mujeres que abortan, no voy ahora a juzgar a las mujeres que dejan su cuerpo para una gestación por sustitución. Simplemente y centrándonos en el menor, que es en lo que se centraba la contertulia, creo que todo aquello que apunta a la creación de vida de un niño, es positivo, sobre todo cuando no se puede hacer de otra forma.

¿Nos metemos en otro charco? La clonación, las células madre. Tórrida temperatura en el solsticio de San Juan de verano como para pensar en otros charcos que no sean los de la playa, para los peques de la familia. Hagamos caso a Almudena Negro , y resolvamos tema a tema. La adopción merece unos cambios y retoques legales antes de meternos en más.

Feliz San Juan de Verano