Delicias

Ni sobaos ni cobartas; el postre más fino y delicioso de Cantabria es este

El confitero Ángel Blanco inventó La Polka, con una base de hojaldre que se lleva trabajando en obrador desde hace más de 120 años

Ni sobaos ni cobartas; el postre más fino y delicioso de Cantabria es este
Ni sobaos ni cobartas; el postre más fino y delicioso de Cantabria es esteConfitería Blanco

Muchos son los postres que dan buena cuenta de la deliciosa repostería cántabra: el sobao pasiego, la quesada,el helado de mantecado, las corbatas de Unquera... delicias todas ellas, pero a este lista aún tienes que sumar una más, que no por ser menos conocida merece menos reconocimientos.

Pasteles de hojaldre de Confitería Blanco.
Pasteles de hojaldre de Confitería Blanco.Confitería Blanco.

De hecho, quienes lo han probado lo ponen en el número uno de la lista de los postres más exquisitos de Cantabria. y es que el hojaldre que hacen en esta confitería de Cantabria en la que llevan 120 años trabajando con esta masa, que es una de las más complicadas de cocinar, es una auténtica locura gastronómica.

En 1898 abre en Torrelavega, la confitería Blanco, apostando por recetas absolutamente artesanas y una repostería de mimo y cuidados. Su producto estrella que, literalmente se deshace en la boca, es el hojaldre.

Hoy es la cuarta generación la que está a los mando de esta confitería y el sabor y la calidad siguen siendo las mismas de siempre, no se ha cambiado nada del recetario con el que nació el negocio y que ha sido y es todo un éxito.

María Blanco es la personas que hoy dirige este obrador, fue su bisabuelo el que arrancó el negocio y ella puede sentirse más que orgullosa de haber podido llegar hasta aquí, y más en un mundo en donde cada vez se consume más bollería industrial, pan del que se pone duro al pasar dos horas y mucho cake americano, por eso cuando nos encontramos con un obrador que sigue apostando por los clásicos y lo hace con una excelente técnica, hay que quitarse el sombrero.

El bisabuelo de María aprendió a hacer el hojaldre con los Jesuitas en Vitoria, ciudad a la que le enviaron con la intención de que se hiciese cura, pero allí se enamoró del oficio de pastelero y volvió a Torrelavega con dos decisiones claras; que no iba a ser cura y que iba a hacer el mejor hojaldre del mundo. Y las cumplió. En aquellos años, en los que no había neveras ni sistemas de refrigeración, el hojaldre se enfriaba en las fresqueras, y la mantequilla que se usa para hacerlo en un pozo.

Fue en el año 1929 cuando la pastelería tuvo sus primeras neveras, que se compraron en la Exposición Mundial de Barcelona. Directas de la ciudad condal a Torrelavega. Pero Ángel Blanco, aquel chavalín que iba para cura, quería ir a más y fue cuando con una base de hojaldre, que hacía mejor que nadie, invento La Polka, que es de donde salen después las corbatas.

La Polka es un hojaldre finísimo con varias láminas que va cubierto con una glasa real.

Inspiración de las corbatas de Unquera

Sin ingredientes ni técnicas industriales, los dulces de este obrador están al nivel más alto que te puedas imaginar en cuanto a repostería se refiere. María Blanco cogió las riendas de la confitería respetando la tradición y el oficio, y manteniendo también el histórico local, que tiene mucha solera y no necesita de reformas para tener encanto, porque en realidad le sobra.

Si quieres probar este postre ya sabes donde encontrarlo, Confitería Blanco, en Torrelavega, donde se hace La Polka que inspiró a la corbata de Unquera. Una delicia que solo puedes comer en este sitio.