Escapadas
Los tres destinos imprescindibles para conocer Cantabria en dos días
Costa, montaña, arquitectura, tradiciones y gastronomía, esto son los tres sitios a los que tienes que ir para conocer la tierruca
Cantabria tiene cientos de pueblos y localidades que son preciosas para conocer y recorrerlas, pero si no dispones de mucho tiempo te vamos a señalar cuáles son los tres pueblos esenciales que tienes que visitar para conocer la comunidad.
Comillas. A 30 kilómetros de Santander encontrarás está esta preciosa localidad que es conocida como la "Cuna del modernismo" y es que aquí podrás visitar gran parte de obra del autor catalán Antonio Gaudí, que conoció al Marqués de Comillas, Antonio López, para el que trabajó levantando bellezas como "El capricho", que era la casa de veraneo del Marqués y que ahora es uno de los emblemas de Cantabria y que se puede visitar, por fuera y por dentro. Gaudí ha dejado su huella en Comillas y de hechos su arquitectura es el símbolo de esta localidad y también de Cantabria
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Otras de las bellezas de este lugar, además de su playa que tiene el agua cristalina y un enorme arenal del que podrás disfrutar todo el año, ya sea tomando el solo en verano y paseando durante el resto de estaciones; también en Comillas puedes visitar el Palacio de Sobrellano, que data del siglo XlX y tiene un espectaculares vistas sobre la costa.
Ahora pasamos al interior de Cantabria, para visitar uno de los pueblos más pintorescos de Cantabria y que se encuentra en el Valle de Cabuérniga. Se trata de Bárcena Mayor, pasear por su calles de piedra es una maravilla, al igual que disfrutar de la tranquilidad de esta localidad, en donde las casas parecen sacadas de un cuento, con las paredes en piedra y enormes balcones de madera decorados con flores. En Bárcena Mayor conocerás la arquitectura tradicional de los pueblos cántabros.
El tercer destino para empaparse de Cantabria visitando tres lugares es Potes, que es la capital del Valle de Liébana, el lugar ideal para disfrutar de un cocido lebaniego y para hacer una ruta en plenos Picos de Europa. En 2020 este pueblo ganó el galardón a pueblo más bonito de España y no sorprende porque tiene todo lo que necesitas en un pueblo para enamorarte de él. Arquitectura tradicional, puentes de piedra sobre el río, casas que mantienen la arquitectura tradicional, un entorno idílico, buena gastronomía y productos típicos propios como el orujo de Potes.