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"La Endiablada" de Almonacid, una de las tradiciones más antiguas de España

Esta festividad en honor a San Blas celebrada los días 2 y 3 de febrero se remonta varios siglos atrás
"Cencerrada diabólica" en Almonacid del Marquesado (Cuenca)
"Cencerrada diabólica" en Almonacid del Marquesado (Cuenca)turismocastillalamancha.es
  • Graduado en periodismo por la Universidad Rey Juan Carlos y master en dirección de protocolo y diseño de eventos por la Universidad Camilo José Cela. Apasionado de la comunicación. Ha trabajado en gabinetes de prensa de eventos de renombre como los Premios

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 "La Endiablada" de Almonacid del Marquesado (Cuenca) en honor a San Blas es una festividad que se celebra los días 2 y 3 de febrero y que cuenta con siglos de tradición. Danza, colorido, devoción y rituales componen esta celebración protagonizada por los diablos y las danzantas.
Las raíces de esta tradición milenaria
Los orígenes de esta celebración son muy dispersos y variados, los historiadores ubican el origen de "la Endiablada" asociado a la celebración prehistórica de la Candelaria, mientras que el culto a San Blas se uniría a la Candelaria a finales de la Edad Media, adoptando los cencerros y danzas como elemento unificador de ambas festividades.
En este punto, si nos ceñimos a fechas y hechos concretos, en el año 1332 se origina la aldea Puebla de Almenara cuyos habitantes practicaban culto a San Blas. Esta aldea termina despoblada a mediados del siglo XV y es entonces cuando sus habitantes se desplazan a Almonacid donde siguieron la tradición religiosa hacia la figura de San Blas que se ha mantenido hasta la actualidad.
Los diablos son los miembros de la hermandad religiosa con el mismo nombre, dedicada a la Virgen Candelaria y San Blas. Dentro de esta hermandad existe un “diablo mayor” que será aquel que haya pertenecido a la misma durante más años de modo ininterrumpido.
Durante estos dos días de festividad, los diablos dan vueltas por el pueblo haciendo sonar sus cencerros de forma suave. El momento más icónico llega cuando los diablos se postran de cara a San Blas y comienzan a bailar, a saltar y a mover sus cencerros enérgicamente originando una gran fatiga que deja impresionado a todo aquel que lo presencia.
La vestimenta de estos diablos está formada por un cencerro particular que se encarga a mediad, un traje de dos piezas con telas y colores llamativos, una careta, una porra con una cabeza colocada en su extremo y el "gorro de la Virgen", que se trata de una pieza cilíndrica de la que se fijan flores.
Son diez chicas jóvenes del pueblo compuestas por una alcaldesa, una palillera y ocho danzantas, todas ellas vestidas con falda de colores emparejados, enaguas, pololos, medias, alpargatas blancas adornadas, corpiño y mandil negros. Estas danzantas realizan varios bailes acompañados de música de tambor y dulzaina.
Imagen de "las danzantas" de Almonacid del Marquesado (Cuenca)
Imagen de "las danzantas" de Almonacid del Marquesado (Cuenca)laendiablada.com
El contraste generado por los impactantes saltos y danzas de los diablos y los elegantes movimientos de las danzantas al son de la dulzaina y el tambor conforman una fiesta con un carácter excepcional declarada como Fiesta de Interés Turístico Regional. Por ello, desde la hermandad de San Blas nos comparten los horarios de las diferentes actividades durante las fiestas "la Endiablada".
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