Este pueblo tiene la tasa más alta de piscinas por habitante de España

En el vasto y variado paisaje de España, hay un pueblo que destaca por una característica singular y fascinante. Nos referimos a Illana, un municipio situado en la provincia de Guadalajara. Este lugar cuenta con una peculiaridad que lo distingue de cualquier otro en el país: es reconocido por tener el mayor número de piscinas por habitante, gracias a las urbanizaciones que se han desarrollado en las afueras del pueblo.

En toda España, hay 1.266.000 piscinas, lo que supone una media de una piscina por cada 37 habitantes. Mientras que, actualmente, Illana alberga a una población de 776 vecinos. Sin embargo, lo que sorprende es que el número de piscinas en el municipio es asombrosamente cercano a este número, con un total de 734 piscinas registradas por la Dirección General del Catastro, una entidad dependiente del Ministerio de Hacienda y Función Pública.

Esto significa que, de todas las piscinas de la demarcación de Illana, la inmensa mayoría está en sus tres urbanizaciones, que son El Soto, El Cuartillejo y Riollano; mientras que en el pueblo solo hay unas pocas. La mayoría del año, las piscinas de la localidad están tapadas y en desuso, porque la mayoría de las construcciones son, en realidad, segundas viviendas. Lo que también explica el escaso número de habitantes censados.

Esta situación le otorga a Illana el reconocimiento de tener la mayor tasa de piscinas por cada mil habitantes en toda España, con 950; situando a Illana por encima de otros municipios como El Casar de Escalona en Toledo, que cuenta con 780 piscinas por cada mil habitantes, y Olocau en Valencia, que tiene 770 piscinas por cada mil habitantes.

Este tema ha sido objeto de muchas discusiones en el pueblo, captando especialmente la atención de los defensores del medio ambiente. La razón principal de este debate es las sequías que han afectado a la región en los últimos años, lo que ha tenido un impacto negativo en los recursos naturales. En particular, estas piscinas necesitan mucha agua para su mantenimiento, lo que ha llevado a preguntas sobre el uso responsable de este recurso natural.