El pueblo donde te pueden gustar las 'guarras' sin que esté mal visto
En este pueblo manchego sus vecinos no tienen ninguna vergüenza en desear 'guarrillas'
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Chinchilla de Montearagón, un encantador pueblo de Albacete, esconde una curiosidad que sorprende a los forasteros: los habitantes no tienen ningún pudor en desear 'guarras' o pedirlas en el comercio local. Pero, ¿qué son exactamente estas 'guarras'? Aunque para los de fuera, puede sonar un poco extraño, en esta localidad, el término se refiere a un embutido, concretamente a la chistorra.
La historia de la 'guarra' de Albacete
La 'guarra de Albacete' es un producto fresco que tiene sus raíces en la tradición de la matanza anual, donde se aprovechaban todas las partes del cerdo. En tiempos pasados, no se desperdiciaba nada, y las partes menos valoradas se convertían en esta chistorra.
La receta tradicional incluye papada, corazón, riñones y otros cortes del cerdo, que se cocinan y se pican a mano, añadiendo sal, pimentón dulce, ajo fresco, canela y un toque especial de agua de guindillas. Precisamente porque se hacia con las peores partes del cerdo y por su apariencia grasienta y roja, se le bautizó como 'guarra' en estas localidades manchegas. Eso sí, aunque la apariencia de la 'guarra' puede no ser la más atractiva para algunos, su sabor es indiscutiblemente delicioso y ha sido un plato muy potente de la gastronomía manchega.
En la actualidad, los productores de 'guarras' han sabido adaptarse, manteniendo la esencia del producto mientras cumplen con las exigencias actuales de salubridad.
Así que ya sabes, si alguna vez pasas por Chinchilla o por cualquier localidad de La Mancha, no dudes en probar las 'guarras'. Eso sí, ten cuidado al salir de la región; fuera de sus límites, es posible que te miren muy raro si mencionas tu deseo por las 'guarras'.