El compromiso con la Discapacidad une a los grupos en un Pleno repleto de desacuerdos

El Pleno de las Cortes de ayer volvía a poner de manifiesto la distancia existente entre la mayoría de los partidos con representación en la Cámara, especialmente entre el bloque de centro derecha formado por PP y Ciudadanos y el la izquierda, con el PSOE casi en solitario y Podemos.

Solo el compromiso con la discapacidad lograba el apoyo unánime de todos los grupos parlamentarios, gracias a una iniciativa impulsada por el PSOE y enmendada por el PP que salía adelante para instar al Gobierno que preside Fernández Mañueco a presentar en los próximos tres meses un informe con una evaluación de los objetivos y conclusiones del Plan Estratégico de Igualdad para este colectivo, formado por 176.000 personas en nuestra Comunidad, que finaliza el próximo año. Pero, además, la iniciativa reclama a la Junta que antes de junio tenga elaborado el nuevo plan con el visto bueno de las personas con discapacidad y las entidades de iniciativa social y ayuda mutua.

Durante el debate de la proposición no de ley, la procuradora socialista María Isabel Gonzalo advertía de algunas de las carencias que, a su juicio, contiene el actual Plan, especialmente en el acceso a la atención de la población infantil, en la promoción de la inserción laboral y el envejecimiento activo, así como en la mejora accesibilidad a centros públicos y la cultura. Aspectos que decía que se deben tener en cuenta en la elaboración del siguiente Plan Estratégico.

Desde el PP, por su parte, el parlamentario abulense Miguel Ángel García Nieto defendía una enmienda de sustitución a la propuesta socialista que los del puño y la rosa admitían, negaba que el actual plan se esté incumpliendo «porque en todos los ejes que lo conforman están participando las asociaciones del tercer sector y las consejerías afectadas», y lanzaba el mensaje de que en la política de discapacidad no puede haber confrontación, ni debe ser arma arrojadiza entre los partidos. El resto de grupos coincidían en esta última tesis del popular, y se sumaban a la iniciativa al asegurar que el plan, en general, es bueno aunque con matices. Como por ejemplo, el que apuntaba la procuradora de Podemos, Laura Domínguez, para quien en el futuro hay que incidir en la implicación, en la financiación y en la gestión de dicho plan.

Libertad de elección de centro

La Educación tenía también bastante protagonismo en la sesión de este miércoles. Primero con una iniciativa del PSOE con 23 medidas para la mejora educativa que PP y Ciudadanos rechazaban escudándose en los buenos resultados del informe PISA, que vuelve a colocar a Castilla y León a la cabeza en Ciencia y Matemáticas.

Y, segundo, con otra propuesta impulsada por el Partido Popular que sí que salía adelante pero sólo con los votos de los populares, Ciudadanos y Vox (PSOE y Podemos votaban en contra y UPL y Por Ávila se abstenían) por la que Las Cortes piden al Gobierno de España que garantice la libertad de centro educativo de los padres, en referencia a unas recientes declaraciones de la ministra de Educación en funciones, Isabel Celaá, en las que decía que la elección de la escuela por las familias no es un derecho recogido en la Constitución, irritando de esta forma a la escuela concertada.

Cs ya no vetará a Podemos

Ciudadanos no vetará a Podemos tras aceptar las disculpas de Pablo Fernández que comparó a Casado con Mengele. La formación naranja ha aceptado las disculpas del líder de la formación morada y por ello ha levantado el veto que habían anunciado contra Podemos, después de que el pasado martes, durante la sesión de control al Ejecutivo, Fernández comparara a la consejera de Sanidad, Verónica Casado, con el doctor Mengele, el nazi conocido como «Ángel de la Muerte» por sus experimentos con personas en el campo de concentración de Auschwitz.

En su intervención, Fernández advertía a Casado que no si rectificaba y retiraba su Plan para la Atención Primaria de la Comunidad iba a pasar a la historia «como la doctora Mengele de los pueblos de Castilla y León». Tras la sesión, Ciudadanos mostraba su indignación en boca del vicepresidente Francisco Igea, que exigía al líder de Podemos una rectificación o romperían relaciones y que tratarían de extender este veto a la Junta.

Pablo Fernández admitía ayer que sus palabras fueron desafortunadas y por ello pedía que fueran retiradas del diario de sesiones. Además, tras finalizar el Pleno, se acercaba hasta el escaño de la consejera para pedirle disculpas. Si bien, el dirigente de Podemos afeaba a Igea su «exceso de notoriedad» por sus advertencias de veto.