Política

La recaudación fiscal crece un 3% pero rebaja su fuerza por la desaceleración de la economía

El consejero de Economía y Empleo, Carlos Fernández Carriedo, insiste en el compromiso de legislatura de no subir impuestos a familias, pymes y autónomos y otorgar más beneficios al medio rural

Desayunos ICAL con el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, y el director de la agencia, Luis Miguel Torres
Desayunos ICAL con el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, y el director de la agencia, Luis Miguel TorreslarazonIcal

El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, constató que la recaudación tributaria de Castilla y León cerrará el año con una subida en torno al tres por ciento, lo que supone dos puntos menos que el crecimiento experimentado en 2018.

Así lo explicó, en «Los Desayunos de Ical», donde afirmó que la recaudación tributaria «está como el conjunto de la economía, se seguirá creciendo pero a menor ritmo que en los ejercicios anteriores».

«Acabaremos con un crecimiento en torno al tres por ciento, una cifra relevante, cuando hubo años negativos, pero el año pasado estábamos creciendo al cinco por ciento», comentó.

El consejero explicó que los tributos cedidos a las autonomías «son los primeros que se resienten por una desaceleración económica», ya que están muy vinculados a la vivienda y las hipotecas, cuyas decisiones están «más relacionadas con el cambio de ciclo».

Fernández Carriedo lanzó un mensaje claro de su apuesta por un «sistema fiscal moderado, razonable y que no castigue al contribuyente y la inversión» e insistió en el compromiso de legislatura de no subir impuestos a familias, pymes y autónomos.

Asimismo, destacó que bajarán la presión fiscal en la medida que la situación económica lo permita y recordó la próxima eliminación del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, cuya modificación esperan que se apruebe en el primer trimestre del año por las Cortes, una vez remitida por el Consejo de Gobierno. Fernández Carriedo aseguró que la modificación es «muy sencilla» y la tramitación «no tiene que ser muy larga».

Carlos Fernández Carriedo defendió su política fiscal y también recordó su compromiso de otorgar una trato diferenciado al mundo rural para luchar contra la despoblación.

La Junta pretende, dijo, reducir bastantes tributos durante la legislatura, lo que «se irá aplicando en función de que las condiciones económicas nos lo vayan permitiendo, empezando por Sucesiones y Donaciones porque es lo más rápido y urgente».

En relación al medio rural, constató que se elevarán las deducciones fiscales en el IRPF, así como las relativas al Impuesto Transmisiones Patrimoniales, y colectivos adicionales en Sucesiones y Donaciones para las transmisiones de actividades productivas dentro de los ámbitos rural y agrario.

En este sentido, precisó que se prevén nuevas deducciones por adquisición de vivienda en el mundo rural, «a ver si se puede incrementar en porcentaje y más colectivos de edad, facilitando la vida de las personas», señaló.