Las rarezas de Berruguete, al descubierto

El primer escultor del Renacimiento, el palentino Alonso Berruguete vuelve a estar en primera línea. No sólo por la muestra que se acaba de abrir en Valladolid bajo el título «El retablo del banquero», si no por que ha hecho las Américas en otra exposición itinerante que ha recalado en la National Gallery of Art, en Washington, y en el Meadows Museum, de Dallas.

La exposición, en tierras españolas, que se puede contemplar en el Museo Nacional de Escultura de Valladolid, reúne un conjunto de esculturas y relieves procedentes del retablo de la Epifanía de la Iglesia de Santiago, de la propia capital, realizado en 1537 y que han sido restaurados por expertos del recinto museístico, contando para ello con la colaboración de la Consejería de Cultura y Turismo, que intervenido in situ en la arquitectura del entramado.

Se trata de un conjunto, con ocho esculturas y relieves que el banquero Diego de la Haya encargó al artista para ornamentar la capilla funeraria de su familia. Lo inusual de estas obras reside en que se trata imágenes profanas e incluso de representaciones de personas, ajenas a vínculos religiosos, algo muy raro a lo largo de su trayectoria. Es por ello, que hasta el año 1913 no se atribuyó la obra al artista palentino, al aparecer el contrato del banquero por un importe de 600 ducados.

Berruguete rompió el cuerpo central del retablo e hizo que se desvelara como un escenario teatral, incluso dramático. Una escena de la epifanía llena de movimiento que ocupa el espacio central -que es la que se encuentra de gira por los Estados Unidos- mientras que las piezas que las acompañan muestran una docena de esculturas o relieves.

De esta manera se puede disfrutar del grupo del Calvario, las esculturas de la Natividad, la Anunciación y la Virgen con el niño, así como los medallones de San Pedro y San Pablo, al lado de los retratos de los mecenas Diego de la Haya y Catalina Barquete.

El espacio se completa con la intervención realizada en una de las salas dedicada al artista, donde se proyecta el documental «Alonso Berruguete, primer escultor del renacimiento español», en el que se muestran insóliutos puntos de vista, grabados con un dron, de obras del maestro en Toledo, Salamanca y Valladolid.