Unidades del ejército intensifican su despliegue por la Comunidad

La irrupción del coronavirus en España ha provocado la movilización de recursos por todo el país inimaginables hasta hace no mucho. Ver patrullar a militares por las calles y plazas vacías de pueblos y ciudades, con imágenes mas propias de un escenario apocalíptico más propio de ciencia ficción que de la realidad, produce a los ciudadanos que lo ven desde sus casas in moverse cierta zozobra por un lado, pero también una gran tranquilidad por cuanto son conscientes de que están en buenas manos.

Militares de la Brigada de Infantería Galicia VII (Brilat), cuya base está en Pontevedra se han desplegado este martes por varios puntos de la Comunidad, como son Palencia capital y las localidades vallisoletanas de Medina de Rioseco y Mayorga, en Tierra de Campos, dentro de la denominada Operación Balmis. Su misión: vigilar y controlar que todo está en orden y que se respeta el confinamiento, pero también y sobre todo realizar tareas de desinfección en edificios públicos además de en los cuarteles de la Guardia Civil de estos municipios del medio rural, que necesitan de estas labores puestos que los agentes de la Benemérita están enfrentándose cara a cara todos los días a este virus letal y contagioso que ya se ha llevado por delante la vida de más un millar de personas en Castilla y León, según los últimos datos facilitados por el Gobierno autonómico.

Además, según informan fuentes militares, también este martes está prevista la llegada a nuestra Comunidad de dos nuevos equipos de descontaminación que se van a sumar a los trabajos que está llevando a cabo la Brilat. Uno de estos equipos es la Unidad de Servicios de Base (USBA) “Cid Campeador”, que viajara desde Burgos, y otro del Regimiento de Defensa NBQ ‘Valencia’ número 1 que se desplazara en helicóptero hasta la base pontevedresa General Morillo de la Brilat.