Sin música, sin bailes y sin toros en el gran día de Valladolid

Simplemente una ofrenda floral en la Plaza del Salvador de Valladolid, y presidida por el alcalde de la ciudad, Óscar Puente, el de la Cofradía de San Pedro Regalado, Víctor Menéndez Quintana, así como los portavoces de los distintos grupos municipales del Ayuntamiento. A eso se ha reducido uno de los grandes días marcados con rojo en el calendario de miles de vallisoletanos y en que se honra al patrón de la capital, San Pedro Regalado, nacido hace más de 700 años en la que es ahora la calle de Platerías.

Allí, Puente, ha pedido al patrón de Valladolid, San Pedro Regalado, su ayuda para “salir de esta” lo “antes y lo mejor posibles”, con el menor sufrimiento de aquellas personas que han visto afectado su trabajo, negocio o actividad por los efectos del Covid-19.

En una jornada como la de hoy, la Plaza Mayor, y también la Plaza de San Pablo se deberían transformar, para recuperar tradiciones como los oficios artesanales o los bailes regionales, que al son de la dulzaina y tamboril deberían atravesar distintas calles de la ciudad. Pero hoy todo es silencio, aunque algún vecino, por distintos quehaceres pasee por las calles más céntricas.

Un día donde el Mercado Castellano hace las delicias de mayores y pequeños o el Día de las Casas Regionales y Provinciales de Castilla y León, que tendrá que esperar otro año.

Otro de los actos más esperados es el de la representación de le exitosa ruta teatralizada de “El Hereje”, basado en la novela homónima de Miguel Delibes.

Y también la música debería tener su hueco y su papel protagonista en estos días, con varios conciertos en distintos puntos de la ciudad o la celebración de la Feria Internacional del Disco de Valladolid, que atraer a cientos de nostálgicos, pero que deberá esperar a próximas fechas.

Y la plaza de toros de la ciudad también estará vacía esta tarde, ante un cartel taurino que se esperaba con mucha expectación y donde aparecían los nombres de Morante de la Puebla, José María Manzanares y Andrés Roca Rey.

Este año, como para tantas otras cosas, toca un “paréntesis” y esperar a que esta pandemia concluya para volver a disfrutar de estas citas festivas en familia y con los más allegados.