Coronavirus

Castilla y León reprocha a Sánchez su tardanza en confinar a la gente

Fernández Carriedo asegura que si se hubiera iniciado la cuarentena una semana antes el impacto humano, económico y social “sería mucho menor”

Valladolid durante la cuarentena por el coronavirus.
Valladolid durante la cuarentena por el coronavirus.Wellington Dos Santos PereiraLa Razón

Ante las críticas que está empezando a recibir el Gobierno que preside Fernández Mañueco desde el ámbito económico y empresarial principalmente por su “exceso de prudencia” en la desescalada, ya que a este ritmo la Comunidad tardaría al menos tres semanas más que el resto de territorios de la España autonómica en volver a la “nueva normalidad”, si todo va bien y no hay rebrotes, el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, lanzaba un dardo este mediodía directo a la yugular del Gobierno de España por su “tardanza” en decretar el estado de alarma, cuando ya se empezaban a conocer casos y se sabía más o menos de la peligrosidad de este letal y contagioso virus.

“Si Sánchez hubiese adelantado una semana la cuarentena como pidió la Junta, el impacto humano, económico y social de esta crisis hubiera sido mucho menor”, aseguraba.

Fernández Carriedo se expresaba así a preguntas de los periodistas durante la comparecencia que hacía para dar cuenta de algunos puntos de su gestión en esta pandemia, donde, además, reafirmaba la apuesta del Gobierno autonómico por esta desescalada por zonas básicas de salud, que este lunes beneficiará ya a más de 280.000 personas de la Comunidad después de que el Ministerio de Sanidad haya aceptado la propuesta de Castilla y León de que avancen de fase 42 zonas básicas de salud, que se suman a las 26 de la semana pasada, el 11 por ciento de la población total de la Región. “Apostamos por una salida segura y sin riesgo porque el mayor riesgo para el empleo y la economía es que se produjese una recaída o un rebrote de la enfermedad, y por eso estamos fortaleciendo las medidas de liquidez a las empresas”, aseguraba el consejero.

Además, a esta buena noticia hay que sumar que Castilla y León en su conjunto avance a la denominada fase 0,5 que, entre otras cosas, permitiría la pesca y salir al campo, servicios funerarios en presencia de hasta diez personas, la reapertura del servicio de préstamos en bibliotecas o que los comercios y concesionarios de coches no sólo puedan atender a sus clientes con cita previa sino que puedan hacerlo sin ella cuando el establecimiento esté vacío. Sin embargo, esta medio fase seguiría prohibiendo las terrazas de bares y restaurantes o las reuniones de hasta 10 familiares en un mismo domicilio, además de la movilidad entre municipios salvo por motivos laborales.