Un Valladolid intenso y bien plantado se lleva los tres puntos de Granada (1-3)

Las cosas del fútbol son así. De estar cuestionado apenas hace dos semanas, jugándose el puesto Sergio González ante el Athletic a salir reforzado de uno de los campos más difíciles de la categoría, el del Granada, que había comenzado la temporada de una manera magistral tanto en Liga como en Europa. Pero allí llegó el Real Valladolid, plantó su bandera, y con un juego intenso, ordenado y sin pifias atrás, consiguió un botín más que importante, para salir de los puestos de abajo y seguir escalando hacia posiciones medias de la tabla.

Una victoria más que merecida, aunque con momentos de zozobra y miedo antes lo visto en anteriores jornadas, pero esta vez el Real Valladolid recuperó esas sensaciones defensivas de otra temporadas, que habían desaparecido en las primeras jornadas.

No había mucho que pensar. Sergio decidió repetir el once que conseguía la primera victoria hace dos semanas en Bilbao, por eso de la superstición y está vez le volvió a salir bien. Y eso que las cosas arrancaban mal, cuando Plano sólo ante Rui Silva, tras un pase filtrado de Guardiola -uno de los mejores en el encuentro- lo mandaba fuera cuando lo tenía todo a su favor.

A partir de ahí, partido de toma y daca, jugándose en el centro del campo y sin chispa ofensiva alguna por parte de los dos comparecientes, hasta que en el minuto 32 Machís lanzaba el primer balón a puerta del encuentro. Guardiola pudo adelantar a los suyos, pero se escoraba demasiado para lanzar el balón fuera.

Precisamente el 7 de Valladolid en un balón filtrado a la banda ponía un peligroso balón al área que Óscar Plano, adelantándose a Germán, remachaba a la red el 0-1, en el tiempo de prolongación.

Y no podía comenzar mejor la segunda parte con una cabalgada de Marcos André que entraba en el área y que ponía el 0-2, también con algo de ayuda por parte de Rui Silva, que no estuvo muy fino en su estirada.

El Granada, también algo tocado por los efectos de la Covid, introdujo tres cambios de golpe, todos ofensivos con la entrada de Yangel Herrera, Suárez y Soldado. Y todo ello dio sus frutos en un saque de esquina, cuando Domingos Duarte se encontraba un balón suelto en el área pequeña para reducir distancias. 1-2 y otras vez a sufrir, como el día del Huesca.

El Granada se volcó pero con pocas ocasiones ante una defensa muy bien plantada, esta vez sí, liderada por Joaquín. Y Sergio esta vez si que acertó con los cambios con la entrada de Janko primero, y luego con Toni, Javi Sánchez y Jota, en el que era el debut del joven internacional portugués sub-21. Y precisamente sería el autor del tercer gol, al robar a Milla un balón al borde del área, con una gran presión del luso y una sobresaliente definición para poner el 1-3 final.

Tres puntos de oro, que sirven a los pucelanos para salir del descenso y que deberán refrendar su ascenso el próximo viernes ante un Levante en horas bajas. ¿Será el despegue vallisoletano?