Pandemia
Igea, tras ser declarado persona non grata: “Es lo que toca; no me he presentado a Míster España”
El vicepresidente de la Junta entiende como “lógico y normal” las críticas de los sectores afectados pero insiste en que su obligación es tomar decisiones y proteger la salud de los ciudadanos
El vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, es consciente de que está siendo el blanco de las críticas de parte de la población de esta Comunidad por las medidas de restricción y limitaciones para contener al virus, y especialmente de los sectores afectados por dichas medidas, como los hosteleros, los comerciantes o los propietarios de centros deportivos o salones de juego.
De hecho, tanto a él como al presidente Fernández Mañueco les han declarado personas “non gratas” en sus provincias, como ha hecho este jueves la asociación de hostelería de Palencia, además de pedir su dimisión por la gestión de esta pandemia, algo que también han pedido desde la oposición socialista y Podemos, después de que el Tribunal Supremo tumbara el toque de queda a las ocho de la tarde.
Pero pese a estas feroces críticas, que Igea entiende “lógicas y normales” dentro de lo que es una “reacción humana” entre aquellas personas y colectivos que peor lo están pasando por las consecuencias económicas de esta crisis sanitaria, el también portavoz de la Junta tiene claro igualmente que “es lo que toca” y que él no están política ni en la Junta para caer simpático a nadie ni hacer amigos, sino para tomar decisiones y proteger la vida y la salud de los ciudadanos
“No me he presentado a un concurso de míster España”, decía, mientras aseguraba que aunque su obligación pasa también por escuchar a las personas y colectivos sus inquietudes así como atender sus peticiones, insistía en que él no está tampoco para tomar decisiones “como si esto fuera un concurso de popularidad”.
“Intentamos encajar las críticas con humildad pero tenemos una responsabilidad que debemos asumir”, afirmaba, mientras admitía que la vida le han enseñado que por encima de otra cosa está a cumplir con la responsabilidad de cada uno y aseguraba que no tiene “ningún problema en pedir disculpas” si hubieran tomado medidas que hubieran antepuesto otros intereses a los de “la vida de los ciudadanos”.
Y tras ser preguntado si se encuentra cansado de estar siempre en la diana y en boca de todos, Igea tampoco se escondía, fiel a su estilo, y aunque reconocía que sí que está cansado de ser el centro de todas las críticas, dejaba claro igualmente que no se puede permitir relajarse ni cansarse.“Es lo que nos toca”, insistía, a la vez que avanzaba que seguirá con la misma fuerza y convencimiento hasta que esta alerta sanitaria toque a su fin. “Que nadie lo dude, vamos a a estar aquí hasta que esto se acabe”, finalizaba.
Democracia en España
Por otro lado, se refería a las polémicas declaraciones de Pablo Iglesias poniendo en cuestión que en España haya una democracia plena, asegurando que “lo que pone en solfa la democracia” es ver a “medio Gobierno alentando la violencia en las calles, al incumplimiento de las leyes y a la presión a los periodistas”, en referencia al tuit del secretario de Organización de Unidas Podemos y parlamentario, Pablo Echenique, animando a salir a la calle con violencia por el caso de Pablo Hasél y por las declaraciones ayer en el Congreso del vicepresidente pidiendo más control público a la prensa.
Y respecto a las declaraciones recientes del presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, José Luis Concepción, en las que sostuvo que “la democracia de un país se pone en solfa desde que el Partido Comunista, que es al que pertenece este señor (en referencia a Iglesias), Igea prefería no entrar al trapo aunque decía que el Partido Comunista “es un partido legal” que “puede estar en el Gobierno” una vez que asume los principios constitucionales, aunque matizaba después que el fin que busca el comunismo a través de la Historia “no es la democracia sino la dictadura del proletariado”.
Críticas de los obispos
Igea tambiéb respondía a las críticas del arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez, sobre el aforo en las iglesias, que este jueves se ha matizado un poco al permitirse un tercio del aforo y suprimir el tope máximo de 25 personas. “No está ni en la Biblia, ni en el Nuevo Testamento decir amén a lo que diga un cardenal”, decía el portavoz de la Junta, mientras diferenciaba entre la jerarquía eclesiástica y el mensaje evangélico “que nos lleva a proteger la vida del resto de hermanos”. “No hay diferencia, somos todos miembros de la Iglesia”, sentenciaba, a la vez que recordaba que en su caso cree más en la importancia del mensaje evangélico que en el mensajero “puesto que la mejor de las cartas la puede transmitir un mensajero andrajoso”.
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