Tribunales

Condenado a cinco años de prisión por compartir pornografía infantil en Valladolid

Al acusado se le encontraron miles de archivos pedófilos

Exterior de la Audiencia Provincial de Valladolid
Exterior de la Audiencia Provincial de Valladolidlarazon

La Audiencia Provincial de Valladolid ha condenado a cinco años de prisión a un programador informático, L.P., por descargar y compartir fotografías y vídeos de pornografía infantil de menores de edad, en algunos casos mostrando un “notorio trato vejatorio y degradante”.

Al procesado se le intervinieron varios discos duros y pendrives en noviembre de 2016 tras detectar cerca de un centenar de descargas de estos archivos, y en ellos encontraron miles de archivos pedófilos, por lo que ha sido condenado como responsable de un delito de posesión y difusión de pornografía infantil.

En algunos de los archivos localizados las imágenes reflejan un notorio trato vejatorio y degradante hacia los menores y desprecio hacia la dignidad humana debido a la perversidad de los actos mostrados y la brutalidad de los comportamientos exhibidos”, recoge la sentencia facilitada este miércoles por fuentes del TSJCyL.

Los magistrados han considerado probado gracias a las aportaciones del sistema policial Quijote que el acusado descargó y compartió los archivos, tras lo que se comprobó que el implicado intentó borrarlos para no ser descubierto.

Además del periodo de prisión, la resolución judicial ha establecido otros cinco años de libertad vigilada una vez que concluya la permanencia en la cárcel, y ha fijado la inhabilitación del encausado durante siete años para cualquier actividad u oficio sea o no retribuido que conlleve contacto regular con menores.

La sentencia recoge que el acusado reinstaló el sistema operativo poco antes del registro de los peritos de la Guardia Civil, con intención de no dejar rastro de la descarga de los archivos, aunque dejó evidencia de entre 630 y 640 entradas “pedófilas” en el software de descarga.

El acusado había argumentado que los archivos se habían descargado conjuntamente al pretender obtener películas infantiles, pero la sentencia establece que es “un experto en informática”, era “consciente” de descargar archivos pedófilos y “desplegó toda una actividad dirigida a ocultar e impedir que se le pudiera descubrir”.

Los magistrados no han tenido en cuenta el argumento de la defensa que aludía a que no se habían seguido los trámites previstos en la Ley de Enjuiciamiento Criminal, así como que no se había respetado la cadena de custodia de las pruebas recogidas.

La Audiencia ha considerado la circunstancia atenuante de dilaciones indebidas para condenar al procesado, para el que el que el Ministerio Fiscal había reclamado siete años de prisión.