Matrícula de honor al compromiso y a la responsabilidad de la comunidad educativa

Una matrícula de honor al compromiso y a la responsabilidad de la comunidad educativa en este curso que está a punto de finalizar. Es la máxima nota otorgada por el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, a alumnos, profesores y familias, durante el acto de homenaje celebrado en Valladolid, en un curso marcado por la Covid-19 y todas las circunstancias que lo han rodeado.

Tras mostrar su orgullo y agradecimiento a todos ellos, el presidente ha incidido en que esta Comunidad ha sido la única en toda España en garantizar una Educación 100 por ciento presencial en todas sus etapas, desde Infantil a Bachillerato y FP. «Está claro que sí era posible hacerlo de esta manera, garantizado el derecho a la mejor educación, el rendimiento académico y la protección de la salud». En este sentido ha apuntado que la media diarias de aulas confinadas ha sido de menos del 0,2 por ciento del total, y que ni uno sólo de los 1.300 centros educativos de la Comunidad ha cerrado.

Y todo ello gracias a medidas de seguridad como el mantenimiento de las distancias, el uso de mascarillas, la medición de CO» o la contratación de más docentes y del refuerzo del personal de limpieza y el de los servicios de transporte y comedor, a lo que se suma la digitalización al servicio de las personas y con más de 10.000 nuevos dispositivos para alumnos con dificultades económicas.

Un esfuerzo que según Fernández Mañueco ha merecido la pena, ya que además de los buenos resultados obtenidos, el Gobierno está tomando como ejemplo a Castilla y León a la hora de plantear medidas para el próximo curso, y ha avanzado que se seguirán aplicando con carácter general, adaptadas a la evolución de la pandemia.

No obstante, el presidente ha recordado que todas estas medidas han supuesto un alto sobrecoste económico, por lo que ha solicitado al Gobierno una nueva línea de financiación adecuada para encarar con garantías el próximo curso. Asimismo, ha vuelto a reiterar la necesidad de una prueba de EBAU única para todo el territorio nacional, con el fin de que algunos alumnos de determinadas Comunidades partan con ventaja a la hora de entrar en grados con altas notas de admisión.

En este acto, que ha sido inaugurado por la consejera de Educación, Rocío Lucas, los estudiantes Ana García del «Divina Pastora» de León y Daniel Merino, del «Cardenal López de Mendoza» de Burgos, han relatado las diversas peripecias que han vivido este último año. También han participado varios docentes de distintas localidades de la Comunidad que han expuesto la experiencia vivida hasta el momento y el compromiso de sus compañeros para conseguir una enseñanza presencial segura. El poeta Fermín Herrero cerraba el acto leyendo dos poemas.