Reto demográfico
Tejer alianzas, estrategias a largo plazo y evitar el frentismo, recetas para repoblar Castilla y León
El vicepresidente Igea llama a aprovechar la tendencia al alza de gente que ha decidido vivir en el medio rural que se está registrando en esta pandemia
Tras regresar de tierras finlandesas, donde ha podido conocer experiencias frente a la despoblación que se llevan a cabo en este país nórdico, el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, participaba este miércoles en Zamora en un foro sobre reto demográfico organizado por el periódico La Opinión- El Correo de Zamora, donde defendía la necesidad de tejer alianzas con otras regiones y países así como la importancia de llevar a cabo estrategias a largo plazo para conseguir el objetivo de repoblar la Comunidad.
En ese sentido, avanzaba que la nueva estrategia autonómica para fijar población en Castilla y León, que se presentará en septiembre según decía, tiene en cuenta a otras regiones como Castilla La Mancha o Aragón, con las que Castilla y León comparte necesidades e inquietudes.
Además, el también portavoz de la Junta apostaba por sacar de la política demográfica los enfrentamientos entre partidos políticos. “La despoblación no solo es un problema de mantenimiento financiero o de los servicios públicos, de generación de oportunidades y trabajo para los jóvenes o de potenciación del balance migratorio positivo o de fijación de población, sino también es un problema político, ya que puede llegar a cuestionar nuestra propia organización política”, aseguraba.
Al respecto, Igea apuntaba a la “desafección” hacia la clase dirigente en territorios despoblados que puede generar problemas políticos de primera magnitud que cuestionan nuestro sistema parlamentario, nuestras mayorías parlamentarias y dificultar la creación de gobiernos estables.
“Tenemos que conseguir sacar la política de despoblación del frentismo y salir de este sitio en el que se ha colocado nuestro país en los últimos cinco o seis años de políticas a muy corto plazo, de campañas reiteradas, que impiden llegar a grandes acuerdos”, insistía.
Pero pese a lo complicado de la situación, el vicepresidente del Gobierno regional destacaba que, por primera vez en 20 años, el balance de residentes ha sido positivo en Castilla y León como refleja la estadística de variaciones residenciales del año 2020 que el INE dio a conocer este martes.
También consideraba como “imprescindible” la comunicación, dentro de una política de infraestructuras necesarias y mencionaba entre los proyectos pendientes el desdoblamiento de la carretera N-122 de la fuura Autovía del Duero o la reivindicación del proyecto de Monte la Reina. “Una política para cada sector de edad: hay una política para los jóvenes, para que no se marchen, pero también tiene que haber una política para las personas entre 50 y 55, que ya han visto que sus hijos se han ido de casa, que tienen su futuro y que quieren volver al territorio”, destacaba.
Y es que, en su opinión, para que la gente vuelva a Castilla y León “tenemos que hacérselo amable, prometerles un futuro, ese futuro a partir de los 50, en un entorno accesible, con comunicación y esa es otra política diferente dentro de muchas que han de confluir”, decía, a la vez que volvía a insistir en la necesidad de cambiar la política migratoria. “Si no somos una tierra de acogida, si no somos capaces de acoger todo el talento que también hay entre refugiados, entre inmigrantes, entre gente que busca su oportunidad, no seríamos capaces de salir de esta situación”, apuntaba,
En este sentido, señalaba que este dato es una de las consecuencias positivas de esta pandemia, que está provocando que mucha gente quiera vivir en el medio rural y esté apostando por trasladar a los pueblos su modo de vida. Por ello, Igea llamaba a aprovechar esa ola que se ha generado para fijar población y que esa tendencia no sea algo de un momento coyuntural.
✕
Accede a tu cuenta para comentar