Óscar Puente alerta de casos irresponsables que pueden cerrar el ocio nocturno en Valladolid

El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha calificado de “irresponsabilidad incalificable” los desalojos este fin de semana de dos locales de ocio nocturno en la zona de Coca de la capital, que duplicaban el aforo permitido y sin mascarillas, “una bomba” que puede llevar a que paguen “justos por pecadores” y ese sector vuelva a cerrar.

En declaraciones a los medios tras desplegar una pancarta de homenaje a la labor de las enfermeras en la vacunación contra la covid en Valladolid, el regidor ha explicado que los locales son el Siroco, que es reincidente, y el Molly Malone, por exceso de aforo y no usar la mascarilla en ambos casos.

Puente ha dudado de que la Junta esté resolviendo los expedientes que se abren a estos locales, que en el caso de las infracciones más graves son de su competencia.

“Son locales no muy grandes, con aforo doble, y sin mascarilla: es una bomba”, ha observado el regidor.

El alcalde ha defendido la correcta vigilancia policial, tanto en estos casos de ocio nocturno como en los botellones, que se están atajando.

Fuentes de la policía municipal han explicado a Efe que los dos desalojos se produjeron la madrugada del sábado al domingo, uno a las tres y otro a las tres y media de la madrugada, tras detectar gran afluencia de gente en los accesos que luego se corroboró en el interior.

En uno de los locales, tras hacer el recuento en el desalojo, había 116 personas, en un establecimiento que como máximo podía tener 66 personas, 50 si se tiene en cuenta el actual nivel por covid, el bajo, que permite el 75 por ciento de la capacidad. En el otro, había 131 personas, en un local con un aforo de 90, que se reducen a 68 en el actual nivel de riesgo por covid.

Por su parte, la presidenta del Colegio de Enfermería de Valladolid, Silvia Sáez, ha secundado este lunes que en Castilla y León se siga vacunando a los más mayores, que son los que tienen más riesgo ante la covid, en lugar de inocular antes a los más jóvenes, la mayoría asintomáticos, ante el repunte de casos en los grupos de menor edad.

En declaraciones a los medios antes de descubrir en Valladolid una pancarta homenaje a la labor de la enfermería en la vacunación, Sáez ha incidido en que por pirámide de población Castilla y León es de las más envejecidas y con más personas en el grupo de entre 90 y 70 años lo que lleva a que ahora se esté en el grupo de los de 50 años.

La presidenta del Colegio de Enfermería de Valladolid ha recordado que ese aumento de casos en los más jóvenes no se está traduciendo en un aumento de ingresos hospitalarios por lo que no cree necesario que se adelante la vacunación a esos grupos de menor edad, que además se van inmunizando al tener contacto directo con el virus.

Ha observado que una cosa es el número de vacunados y otra la de inmunizados por contacto directo con el virus, cuya inmunidad de rebaño, en este último caso, está en el 50 por ciento y no se alcanzará hasta final de año en España, ya que actualmente está en torno al 35 por ciento.

Lo que si está produciendo ese incremento de casos en los más jóvenes es un repunte en los test, en la vigilancia y en los rastreadores, con una mayor presión en atención primaria.

Los sanitarios, por la labor asistencial realizada durante la pandemia y el proceso de vacunación durante casi un año un medio y que aun continúan, son homenajeados en Valladolid durante un acto al que asisten, entre otros, la presidenta provincial del Colegio de Enfermería, Silvia Sáez, y el alcalde, Óscar Puente.