Más secretos de los vetones al descubierto en Ávila

Las excavaciones que la Diputación de Ávila y la Universidad Complutense de Madrid realizan en el castro vetón de Ulaca, en el término municipal abulense de Solosancho, siguen sacando a la luz nuevos “secretos” de este oppidum considerado entre los más importantes y extensos de Europa, con 70 hectáreas.

Los trabajos han sido visitados este jueves por el presidente de la institución provincial, Carlos García, quien se ha felicitado de que “gracias al compromiso” de la corporación y la Complutense, se siga avanzando en el conocimiento de uno de los edificios más significativos y “enigmáticos” del castro: El Torreón.

Junto a este elemento, en torno al cual se han vuelto a centrar las excavaciones de la campaña de este año, que culminarán el próximo 20 de julio, se encuentran otros vestigios icónicos de este lugar, como el Altar de los Sacrificios, la Sauna o la Cantera.

La importancia de la que fue una destacada ciudad vetona, también viene determinada por su población, ya que sus cerca de 300 construcciones apuntan a que pudo llegar a tener en torno a 1.500 habitantes hace unos 2.500 años.

Tras su visita, Carlos García ha señalado que los investigadores “siguen avanzando en el conocimiento sobre El Torreón, enigmático edificio de esta ciudad, que pudo tener funciones religiosas, económicas y políticas muy relevantes durante la Edad del Hierro”.

En este contexto, el presidente de la Diputación ha subrayado que el “compromiso” y el “trabajo” del equipo de los profesores Jesús Álvarez Sanchís y Jesús Rodríguez, del Ayuntamiento de Solosancho y del Área de Cultura de la Diputación, “se va haciendo posible que salgan a la luz los secretos de este castro, referencia internacional de la civilización vetona”.

Al respecto, ha apuntado que “el reto” con estas actuaciones consiste en “unir naturaleza, paisaje, patrimonio y turismo”, en una atalaya privilegiada, situada a unos 20 kilómetros al sur de la capital abulense, desde la que se divisa el Valle Amblés.

Durante la presente campaña de excavaciones se han seguido “desentrañando las claves de este emblemático edificio -El Torreón-, por sus dimensiones, por su ubicación y porque se trata de una de las construcciones más significativas de un poblado tan espectacular como es Ulaca”, según el director de los trabajos, el profesor titular de Prehistoria de la UCM, Jesús Álvarez Sanchís.

En su opinión, lograr conocer el significado y la función que este edificio debió de tener en un paraje natural “tan sobresaliente”, es motivo “de orgullo para cualquier arqueólogo que trabaja en las claves de una ciudad de la Edad del Hierro y que permiten entender, además, el nacimiento de la ciudad de Ávila”.

Hay varios elementos a tener en cuenta para tratar desentrañar la función de El Torreón, entre los que figura su orientación, ya que “mira al ocaso, al contrario que las viviendas, que se orientan hacia el este”.

Asimismo, Álvarez Sanchís subraya el “carácter ciclópeo de los bloques de piedra que lo componen, algunos de más de una tonelada de peso”, así como “la lectura del edificio dentro de su entorno inmediato, marcado por los pastos, los manantiales y el ganado que circula a su alrededor incluso hoy en día”.