Barruelo de Santullán (Palencia) prohíbe regar, lavar el coche o llenar piscinas por escasez de agua

El Ayuntamiento de Barruelo de Santullán (Palencia) ha prohibido regar, lavar el coche o llenar las piscinas particulares pera evitar cortes en el suministro del agua corriente, ante “la grave escasez de agua” que hay en este municipio del norte de Palencia, que ha multiplicado por cinco su población este verano.

El Ayuntamiento ha emitido un bando apelando a la responsabilidad de los vecinos y de los visitantes que estos días multiplican por cinco la población del municipio, donde habitualmente residen 1.200 habitantes, lo que ha ocasionado un incremento en el consumo de agua, según ha explicado en declaraciones a Efe su alcalde, Cristian Delgado.

”El consumo de agua se ha disparado, sobre todo los fines de semana”, ha afirmado Delgado, explicando que en julio y agosto Barruelo de Santullán mantiene una población constante de más de 5.000 habitantes, lo que “ha multiplicado por cinco el consumo de agua” con respecto a los meses normales.

”Otros años la gente venía más escalonada, pero desde la pandemia la gente pasa más tiempo en el pueblo y las casas se abren y no se cierran en todo el verano”, ha explicado el alcalde.

Es algo que ya ocurrió el año pasado, en que este municipio del norte de Palencia, como otros muchos de la provincia, registró un importante aumento de la población en verano, pero no hubo problemas de agua porque había mucha.

Sin embargo este año el Ayuntamiento de Barruelo se está viendo obligado a “administrarla bien” para evitar cortes que “después generan muchas averías y complicaciones”, ha señalado recordando que ya en el mes de julio se emitió otro bando similar para reducir su consumo.

De hecho, el alcalde ha asegurado que en este momento “la escasez de agua es grave” por lo que pide que se restrinja su consumo “a lo estrictamente necesario” para evitar cortes puntuales en el suministro. Por ello se ha prohibido regar patios, jardines y calles, lavar el coche o llenar piscinas particulares y se ha recordado a los vecinos que es obligatorio instalar contadores en la calle o telemétricos a lo largo de este año.

Asimismo ha advertido que mientras siga vigente esta prohibición se sancionará a las personas que la incumplan, con multas que pueden alcanzar los 3.000 euros, y ha precisado que “es temporal” y que se levantará cuando “veamos que el volumen de consumo se normaliza”.