Fauna
Nacen buitres negros por segundo año consecutivo en la Sierra de la Demanda (Burgos)
Esta rapaz necrófaga no criaba en la zona desde hace más de medio siglo
Siete pollos de buitre negro han nacido este año en la burgalesa Sierra de la Demanda, de los cuales han logrado sobrevivir dos, que ya han sido equipados con emisores GPS para seguir con detalle sus movimientos cuando abandonen el nido. Fue el año pasado cuando se produjo la primera reproducción en décadas de esta especie amenazada en la zona, aunque los dos pollos que nacieron el año pasado no lograron salir adelante.
Estos nuevos nacimientos son todo un hito en el proceso de consolidación de la primera colonia reproductora de buitre negro en tiempos recientes en el extenso ámbito geográfico del Sistema Ibérico, donde esta rapaz necrófaga no criaba desde hace más de medio siglo.
Los dos pollos que han nacido este año confirman el éxito de las reintroducciones de buitre negro que se iniciaron en el año 2017 en la Sierra de la Demanda, a iniciativa de la asociaciones conservacionista Grefa, con la colaboración de la Junta, el Gobierno de La Rioja y los ayuntamientos burgaleses de Huerta de Arriba y Tolbaños de Arriba.
Un trabajo que se desarrolla dentro del proyecto Monachus, bajo cuya cobertura se han liberado en los últimos cuatro años más de medio centenar de buitres negros en la sierra burgalesa, un gran número procedentes de la Red de Centros de Recuperación de Animales Silvestres de la Junta, y a día de hoy se cuenta con veinte parejas.
De esos nueve huevos -las puestas de los buitres negros están compuestas de un solo huevo- llegaron a nacer siete pollos. La gran mayoría de estos pollos tenían sus nidos en varios términos municipales de la provincia de Burgos, salvo uno que se ubicaba en territorio riojano.
Finalmente, de los siete buitres negros nacidos en la Sierra de la Demanda en 2021 sobreviven actualmente dos, ambos con sus respectivos nidos en la provincia de Burgos, uno en el término municipal de Huerta de Arriba y otro en el de Tolbaños de Arriba. De las dos parejas que han criado estos pollos, una está formada por un progenitor liberado en la Sierra de la Demanda y por otro exógeno –procedente de otra colonia de la especie- y la otra por dos miembros exógenos.
Cuando los dos pollos que han salido adelante contaban con unos ochenta días de vida, fueron marcados con emisores GPS y anillas identificativas, para poder reconocerles individualmente y seguir sus movimientos cuando abandonen el nido. Estos marcajes se llevaron a cabo con el apoyo técnico del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
✕
Accede a tu cuenta para comentar