Aurelio González (UPA): “En comarcas como Aliste, Sayago y Sanabria, nacen, por desgracia, más lobos que niños”

Más de medio centenar de integrantes de UPA, COAG y Asaja se concentraron hoy frente a la Subdelegación del Gobierno en Zamora para expresar su rechazo a la pretensión del Ejecutivo nacional de incrementar la protección del lobo en todo el territorio español con la inclusión del cánido en el Listado de Especies Silvestres de Protección Especial, incluidas las poblaciones ubicadas al norte del río Duero.

Para ello, aprovecharon la presencia en la capital zamorana del secretario de Estado de Medio Ambiente Hugo Morán, quien mantuvo una reunión con alcaldes de municipios afectados por el vaciado del embalse de Ricobayo, en la que también participaron el delegado del Gobierno en Castilla y León, Javier Izquierdo, y la presidenta de la Confederación Hidrográfica del Duero, Cristina Danés, entre otros responsables e instituciones y entidades públicas.

“Trasladamos nuestra postura a los territorios a los que se desplazan ellos, ya que son tan reticentes a recibirnos en el Ministerio. En Castilla y León, hay siete ataques diarios; cuatro a la semana, en Zamora y, en comarcas como Aliste, Sayago y Sanabria, por desgracia, nacen más lobos que niños”, afirmó, en declaraciones a la agencia Ical, el secretario general de UPA en Zamora, Aurelio González.

“Eso es lo que hemos trasladado al Ministerio de Transición Ecológica, que también es de Reto Demográfico, que es en lo que deberían trabajar y poner su empeño. Aquí, los lobos están en franca expansión y el que corre verdadero peligro de extinción es el ganadero”, denunció.

Por su parte, el presidente provincial y máximo responsable regional de COAG, Lorenzo Rivera, señaló a Ical que “hemos venido a saludar al secretario de Estado, a darle unos pitidos, tirar unos petardos y recordarle que Zamora tiene 500 lobos, casi como toda Francia” y apostilló: “Nos sobran alimañas porque tenemos lobos, jabalíes, corzos, ciervos, buitres, conejos… de todo y hacen muchísimo daño a las ganaderías extensivas y a los agricultores”.

Igualmente, Rivera apuntó que, antes del verano, “había una intención clara de que el 25 de septiembre fuese la fecha tope dispuesta para la prohibición total de cazar al lobo” pero afirmó “percibir” que “se ha enfriado un poco esa euforia” y recordó que, en cualquier caso, “hay demasiados problemas en España que exigen atención prioritaria como, por ejemplo, frenar la despoblación”.