El alcalde de Salamanca pide emplear los fondos de recuperación europea “con cabeza” para que “todos los territorios seamos de primera”

El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, abordó el destino de los fondos europeos de recuperación tras la crisis de la Covid-19 en su intervención en la misa solemne de la patrona, la Virgen de la Vega. Al respecto, pidió emplear estas ayudas “con cabeza” para que “todos los territorios seamos de primera”.

Asimismo, consideró que Salamanca necesita “ese impulso económico” para acompañar el “empuje creativo” de la ciudad, que estos días celebra sus fiestas patronales en honor a Santa María de la Vega, cita en la que a pesar de faltar la tradicional ofrenda floral a la Virgen y la procesión de la imagen, sí tuvo lugar la tradicional misa solemne en la Catedral, presidida por el obispo, Carlos López.

En su intervención, el alcalde detalló los daños de la pandemia, “que ha trastocado nuestros planes y nos ha obligado a reinventarnos en todos los sentidos”. Y reconoció que tras mucho trabajo por parte de todos los sectores implicados, “hoy podemos echar la vista atrás y valorar los avances, que no son pocos, y que hemos conseguido entre todos”. Aludió precisamente a esa unidad y acuerdo como factores clave para el fin de esta crisis “sin precedentes”.

Por eso, el alcalde solicitó a la Virgen que “ese espíritu de concordia del que Salamanca es un ejemplo continúe siendo el que inspire nuestras decisiones y nuestras acciones”, además de protección “ante cualquier tentación de división movida por intereses ajenos al bien común”. Apeló al coraje y determinación de los salmantinos durante a pandemia para afrontar las dificultades, ya que a pesar “de las dolorosas bajas sufridas”, invitó a “encarar el futuro con esperanza, porque tenemos ante nosotros grandes oportunidades”.

En este sentido, Carlos García Carbayo afirmó que “la solidaridad europea tiene que resultar lo más efectiva posible”, lo que implica un empleo de los fondos de reconstrucción “con cabeza”, algo que es “una obligación moral”, tal y como consideró. Subrayó que “lo que seamos capaces de hacer con ese dinero” será la clave para que “nadie camine solo ni se quede al margen de la recuperación” y de que todos los territorios sean “de primera”.

“No somos más que nadie, pero tampoco somos menos que nadie”, argumentó el primer edil para solicitar “ese impulso económico” que acompañe el “empuje creativo” de la ciudad. “No nos resignamos a perder recursos ni ningún tren que nos conduzca al progreso, porque somos ambiciosos y nada conformistas”, apeló.

García Carbayo reclamó el lugar de Salamanca en el mundo: “yo creo absolutamente en nuestras posibilidades y me siento profundamente orgulloso de los ciudadanos a los que represento”. Concluyó su intervención pidiendo a la Virgen fortaleza y sabiduría “para defender los intereses de nuestros vecinos con acierto” y prometió a cambio su “compromiso de trabajar sin descanso por todos los salmantinos para construir entre todos un futuro mejor”.