Turismo
Llega un fin de semana marcado en rojo para muchos familias de España. El hecho de que el próximo martes sea fiesta -Día de la Hispanidad- ha hecho posible que numerosas personas hayan hecho planes para este Puente -en el caso de no tener obligaciones laborales-. Además, se prevé buen tiempo para los próximos días. Por eso desde La Razón, les proponemos nueve rincones mágicos, uno por provincia, para ayudarles si todavía están indecisos qué visitar.
Garganta del Arbillas (Ávila)
Se trata de una garganta excavada en plena sierra de Gredos. Un recorrido ideal para principiantes y donde el visitante podrá disfrutar de estanques naturales tallados por el agua en la roca, piscinas naturales y cascadas.
La zona más concurrida se haya entre la carretera de Arenas y Poyales, donde se pueden contemplar las pozas más vistosa. Y todo ello, con el rumor de los pintos, y el ruido de aguas.
Para los más intrépidos, el barranco en Poyales del Hoyo, con saltos, rapeles y toboganes y saltos.
Frías (Burgos)
A 80 kilómetros de la capital burgalesa aparece este pequeño pueblo de corazón medieval. Frías, considerada por decreto real como la ciudad más pequeña de España. Además de pertenecer a la Asociación de los Pueblos más bonitos de España cuenta con el reconocimiento de Conjunto Histórico Artístico. No es para menos.
Uno no deja de recorrer las callejuelas buscando estampas idílicas que las hay a doquier, desde el puente medieval que atraviesa el río Ebro, con su puente fortificado de 9 arcos o las Casas Colgadas, que poco o nada tienen que envidiar a las de Cuenca.
Y un monumento que sobresale en su conjunto medieval es su castillo, que se halla en el roquedal más alto del cerro. Merece la pena visitarlo para contemplar las extraordinarias vistas de la localidad.
Pero esta ciudad tiene más encantos, como la Iglesia de San Vicente, el Convento de Vadillo, miradores. Y ya muy cerca, pues las cascadas de Tobera o de Tobalina. Una ruta de un día, que merece mucho la pena.
Astorga y Castrillo de los Polvazares (León)
La cultura y la gastronomía nos lleva a tierras leonesas. Y aquí mejor dos platos que uno. Para abrir boca, la capital de la maragatería, Astorga, con varios edificios de cuentos de hadas. Desde su plaza del Reloj, con un aroma donde se perciben los ricos embutidos de estas tierras como las cecinas, chorizos, lomos...
Seguimos caminando hasta el Palacio Episcopal, obra del maestro Gaudí, que nos transporta a las ideas modernistas de finales del siglo XIX. Y a su lado, otra joya patrimonial, la Catedral de Santa María, donde uno no debe perderse el retablo mayor, obra de Gaspar Becerra.
Para los que viajan con niños, un par de alternativas. Una visita a las murallas o al curioso Museo de Chocolate, que no deja indiferente mañana.
Y para cerrar boca, aunque en Astorga se puede comer de lujo, uno debe acercarse hasta Castrillo de los Polvazares, que nos transporta a las calles empedradas y casonas tradicionales maragatas, con blasones en sus fachadas y donde es pecado no probar el tradicional cocido maragato. Hay bastantes restaurantes para elegir, pero eso sí, con reserva para no perderse semejante y delicioso menú.
Navegando por la Canal de Castilla palentino
Desde Frómista se puede navegar por dos recorridos que alcanzan los diez kilómetros en plena meseta castellana. Un recorrido que se realiza en paralelo al Camino de Santiago francés, haciendo más atractivo el punto de encuentro entre la senda jacobea y el Cana.
Una iniciativa de la Diputación, que lleva ya años con el barco “Juan de Homar” surcando las aguas palentinas y que da varias opciones a los visitantes para disfrutar de esta opción o bien desde Frómista o desde Boadilla del Campo.
Imprescindible reservar ya que la embarcación cuenta con una capacidad para 38 pasajeros. Teléfono: 673 368 486.
La Peña de Francia (Salamanca)
Un macizo rocoso, de 1.723 metros de altura se yergue en plena sierra salmantina, la Peña de Francia que no solo nos propone una vista excepcional al Parque Natural de Las Batuecas, sino que cuenta con un importante legado histórico y religioso.
Allí se encuentra el Santuario de Nuestra Señora de la Peña de Francia, a la que cada año acuden miles de visitantes. Aunque se sube por una carretera sinuosa, merece la pena llegar hasta aquí para después de disfrutar de los pueblos anexos como La Alberca, Mogarraz o Las Batuecas.
Granja de San Ildefonso
Se trata de uno de los monumentos más emblemáticos del conjunto Histórico Monumental de Castilla y León. Un palacio adornado con esculturas y fuentes al estilo de Versalles y que sirvió en su día de espacio de recreo de los monarcas españoles.
Las salas del palacio abiertas al público corresponden a los antiguos apartamentos reales, donde se encuentran las habitaciones privadas de los Reyes donde destacan la Galería de Retratos, el Dormitorio de Sus Majestades o el Gabinete de los Espejos. Y no puede faltar el Museo de Tapices.
Y todo ello con unos jardines a la francesa, que cada verano -en periodo antes de la pandemia- ha congregado a miles de visitantes para ver sus únicos y espectaculares juegos de agua. Para rematar la faena, uno no debe privarse de las viandas, sobre todos los alubiones de la Granja, que con tanto esmero realizan a diario los restaurantes de la zona.
Castillo de Gormaz (Soria)
Situada en un alto cerro de la localidad de Gormaz, nos hallamos ante una fortaleza de origen musulmán y que es un Bien de Interés Cultural Patrimonio Histórico de España.
Llegó a ser la fortaleza europea más grande de su época y con un perímetro amurallado de más de 1.200 metros. Merece la pena acercarse a este castillo, cuya entrada es gratuita y que sirvió para las escenas de exteriores de la película “El Cid”, protagonizada por Charlton Heston y Sophia Loren.
La Santa Espina (Valladolid)
Se trata de una pequeña pedanía y que cuenta con un precioso monasterio de origen cisterciense, y que se mandó construir allá por el año 1147. Imprescindible realizar una visita, si puede ser guiada mejor, por que resulta muy amena y son sólo dos euros.
Dos claustros espectaculares, la Capilla de la Reliquia, la Capilla de los Vega, y la propia iglesia. Y para completar la visita disfrutar de la enorme muralla exterior, y para los senderistas les proponemos una ruta en dirección al embalse, donde el silencio, sólo roto por el murmullo de las aves, nos transporta a un lugar idílico.
Y para el buen yantar, “El Rincón del Labrador”, con guisos únicos y de temporada. Pero, ojo, se debe reservar.
Lagunas de Villafáfila (Zamora)
Ya para finalizar nuestro periplo por todas las provincias de Castilla y León, llegamos a un oasis de paz y naturaleza en plena provincia zamorana, las Lagunas de Villafáfila. Un espacio natural protegido y donde “descansan” miles de aves.
Para empezar la visita, recomendable empezar por la Casa del Parque, para conocer de primera mano todo aquello que vamos a tener ante nuestro ojos y para saber un poco más de la naturaleza de las aves. Los humedales dan refugio a un sinfín a un gran número de aves migratorias y las parcelas de secano conservan una de las mayores poblaciones de avutarda de Europa.
Y ahora, no es mal momento para visitarlas.