Más librerías, menos cines y una única tienda de discos

El sector de la cultura ha sido uno de los más afectados por la pandemia del coronavirus. Cine, teatro, conciertos, música. Pero el valor de la palabra ha resistido. El mundo del libro y del papel, lejos de extinguirse, como muchos agoreros llevan diciendo desde hace tiempo, resiste y resulta gratificante observar en los últimos años, que lejos de cerrar, el número de librerías han aumentado en Valladolid.

Por contra, los cines, amenazados por las plataformas digitales, siguen en caída libre y tan solo en la capital vallisoletana hay tres abiertos y otro más en Arroyo de la Encomienda, a los que hay que sumar los existentes em Medina del Campo y Pedrajas de San Esteban. El pasado año cerraba sus puertas de manera definitiva Cinesa en el “vacío” y “olvidado centro Equinoccio Zaratán y los míticos Casablanca, situados al pie del Teatro Calderón vallisolenao no han vuelto a abrir sus puertas.

Y qué decir del mundo de la música. Uno se las ve y se las desea para encontrar música en distintos soportes que no sean tecnológicos como Spotify, por ejemplo. Y es que la demanda de compra ha caído a niveles irrisorios. El gran espacio que tenían las grandes superficies de la capital para la múisca, como Carrefour o El Corte Inglés, han quedado reducido a una mínima expresión, donde cds languidecen a unos precios de risa. Sólo en la capital sobrevive Disco Center, especializada en vinilos, tras el boom que se está produciendo en los últimos tiempos. Los datos están ahí. Sólo en España el pasado año se vendieron 1,2 millones de vinilos, en pleno auge (a pesar del confinamiento), aunque se quedaron por el camino 2,3 millones de cds.

El presidente del Gremio de Libreros de Valladolid, Miguel Ángel Hernández resalta la “capacidad de resistencia del sector” que se está viendo avalada con nuevas aperturas de establecimiento en la capital, y que han visto también como sus socios se han multiplicado”. Según datos ofrecidos desde el Gremio, en la actualidad en la capital hay 54 librerías, cinco más que en 2019, de las que 33 se encuentran asociadas (seis más que hace dos años).

Hernández destaca el esfuerzo del sector de Valladolid con el fin de incorporar las nuevas tecnologías en su relación con los lectores, abriendo canales directos de comunicación, bien de redes sociales, atención telefónica o servicios de mensajería instantánea. Incluso algunas se han lanzado a la venta online.

Y todo ello, con unas medidas más relajadas que está haciendo posible que las librerías retomen de manera progresiva las actividades culturales con firmas de libros, presentaciones editoriales o cuentacuentos para los más pequeños.

Y coincidiendo con el Día de las Librerías, este 11 de noviembre, el gremio vallisoletano ofrece a lo largo del día descuentos de un diez por ciento como forma de agradecer a lo lectores y clientes su fidelidad y compromiso.