Fernández Mañueco reivindica la libertad de crítica al poder que ejerce el periodismo

Tras la polémica suscitada hace apenas un día por la polémica petición de los equipos de comunicación de algunos partidos, entre ellos el PSOE o Unidas Podemos, de pedir a la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, que censure a algunos medios de comunicación en el Congreso, el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, aprovechaba la entrega de los Premios Cossío para salir en defensa de la profesión periodística yreivindicar su libertad de crítica al poder.

«La libertad de prensa es uno de los pilares delEstado de Derecho y uno de los termómetros esenciales del nivel democrático de un país», decía el jefe del Ejecutivo regional, tras entregar a Ignacio Fernández Sobrino el Premio Cossío a la Trayectoria Profesional.

En su intervención, Mañueco aseguraba, contundente, que se opondrá a cualquier intento de interferir en la «esencial» función de control que asume el gremio de los periodistas. «Ser instrumento de libertad es una de las funciones del periodismo», apuntaba el presidente, mientras recordaba y ponía en valor su labor durante la pandemia.

Además, afirmaba que el periodismo es, en estos tiempos, y los que vienen «más necesario que nunca» para hacer frente , desde el rigor, a las noticias falsas, fuera de contexto o simplificadas al máximo. Y, para finalizar, destacaba también el dinamismo, la capacidad de adaptación y la viveza del buen periodismo que animaba a seguir ejerciendo en esta Comunidad.

Premiados

El exdirector del grupo Atresmedia en Castilla y León, Ignacio Fernández Sobrino, recibía de manos del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, el Cossío a la Trayectoria Profesional.

En su intervención, calificaba su recorrido en la profesión como “el producto de muchas semillas y la síntesis de muchas historias”, y aseguraba que ser acreedor de este premio “demuestra que tengo muchos amigos en el oficio”. “Este premio no es mío, sino de personas como Manolo Martín Ferrán, mi mentor, y del quehacer de una generación que de desperezó hacia una sociedad pionera en una época efervescente con nuevas radios, periódicos y televisiones privadas”, apuntaba.

Recordaba así su experiencia profesional con José Luis Gago, del que dijo que “hizo de la radio española algo único en Europa”, o sus tiempos iniciales en Palencia, Tenerife o Sevilla, donde “hacer una noticia era una aventura” y donde la radio consiguió combinar las historias locales, nacionales “y luego regionales”.

“La radio y la televisión me lo han dado todo, aprendí mucho y pude aplicarlo, y este premio Cossío me permite repasar mi trayectoria y ver que mi mérito, si es alguno, es haberme sabido rodear de personas con una simple exigencia: hagamos cosas y pidamos perdón antes que pedir permiso”, concluía Fernández Sobrino.

En prensa, Álvaro Caballero Villa, de Diario de León, recogía el premio por la serie de crónicas “Puertas afuera”, serie que agrupa 44 crónicas publicadas desde la promulgación del decreto de confinamiento hasta finales de mayo de 2020, mientras que recibía un accésit Patricia Corral Páramo, de Diario de Burgos, por “Desiderio Serrano Serrano, el último ganadero trashumante de Burgos”.

En la modalidad de radio, Eva Elvira Sánchez Ballesteros de la Cadena SER recogía la distinción de manos del consejero Jesús Julio Carnero por el programa “Moncayo, montaña mágica” emitido en las emisoras de la Cadena SER de Soria y Tarazona. Una colección de 21 relatos sonoros, de unos dos minutos de duración, locutados por otros tantos redactores de la Cadena SER. En ellos se habla de historias, costumbres, mitos, leyendas, supersticiones, relatos épicos, hechos curiosos o personajes destacados de los pueblos del Moncayo soriano.; y recibían un accésit Rafael Bermejo y Javier Monterde, de Radio 5, por “La memoria de la tierra”.

En la modalidad de televisión, Ruth García Ribote, de la 7 de CyLTV, ha recogido el premio por “La herida de 2020″ de manos del vicepresidente Francisco Igea. Este trabajo periodístico recoge más de 20 testimonios de personas públicas y anónimas que contaron ante las cámaras de Castilla y León Televisión cómo les había golpeado el coronavirus.

.Mientras que el consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega, hacía entrega del premio en fotografía a la fotógrafa Leticia Pérez, por su imagen difundida por la Agencia Ical bajo el título “Estado de alarma en Valladolid”. La foto recoge el momento en que dos personas descansan en el balcón de su vivienda durante el estado de alarma. Situadas en diferentes puntos de una misma fachada, ambas adquieren posturas parecidas transmitiendo una mezcla de resignación y tristeza, pero también de calma y espera.

Y en la modalidad digital, ha recibido el premio el trabajo de Antonio Corbillón y Marta Madruga titulado “50 años del proceso de Burgos. El juicio que dio alas a ETA”. Este trabajo analiza el secuestro como moneda de cambio de Eugene Bëihl, cónsul de la República Federal de Alemania en San Sebastián, profundiza en la biografía de los condenados y en la influencia de sus abogados, describe el clima de tensión que se vivió en la sala y el papel que jugó la Iglesia católica, con dos sacerdotes sentados en el banquillo.