Agricultura

La remolacha, un cultivo rentable y con mucho futuro

El consejero Jesús Julio Carnero anima a los jóvenes a apostar por él

El presidente de Acor, Jesús Posadas; el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, y el presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar
El presidente de Acor, Jesús Posadas; el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, y el presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado ÍscarJCYLJCYL

Pese al daño que hizo la reforma de la OCM del azúcar hace más de una década a Castilla y León, con el cierre de algunas plantas azucareras como la de la localidad vallisoletana de Peñafiel, y los ataques más recientes del Gobierno de España a través de su ministro de Consumo, Alberto Garzón, «demonizando» el consumo de azúcar, el cultivo de la remolacha no solo se ha recuperado con fuerza de estos golpes sino que sigue siendo rentable para el campo.

De hecho, Castilla y León es la primera productora nacional de remolacha y da trabajo a cerca de cuatro mil personas en la actualidad de forma directa a través del sector primario y la transformación, todas ellas en los pueblos. Además, en los últimos quince años se ha pasado en la Comunidad de 70 a cien toneladas de producción por hectárea.

«La remolacha es un cultivo estratégico y rentable y tiene mucho futuro por delante», aseguraba ayer el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, durante una jornada celebrada este miércoles sobre este cultivo en Valladolid, donde animaba a los jóvenes a apostar por él.

En este sentido, ponía en valor también la capacidad industrial existente en la Comunidad para transformar el azúcar, que, en su opinión, «ha de generar en los próximos años un crecimiento de la superficie en Castilla y León que le permita continuar siendo un cultivo de futuro».

Carnero recordaba igualmente su importancia desde el punto de vista medioambiental, como se revela en el estudio realizado por Itacyl, Acor y Azucarera, que expone a la remolacha como el cultivo que más aporta como sumidero de carbono. El consejero reafirmaba su apoyo a este sector al anunciar que las ayudas asociadas a la remolacha se mantendrán con la nueva Política Agraria Común (PAC), por lo que los cultivadores podrán recibir cada año desde 2023 y hasta 2027 alrededor de 13 millones de euros en concepto de ayudas asociadas.

El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, también participaba en esta jornada, donde defendía también este cultivo y su importancia a la hora de crear riqueza y empleo en la provincia y permitir a los agricultores vivir en el medio rural. Y llamaba a defender el cultivo también ante los ataques en el Plan Hidrológico del Duero y contra los topillos.