Medio Ambiente

Suárez-Quiñones garantiza el patrimonio natural y arqueológico de La Cabrera leonesa

Miembros del colectivo Cabrera Despierta se reúnen con el consejero e insisten en la necesidad de que esta comarca sea declarada Parque Natural ante la proyección de hasta cinco parques eólicos en ella

El consejero de Fomento y Medio Ambiente de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, y la delegada de la Junta en León, Esther Muñoz, se reúnen con miembros del colectivo Cabrera Despierta para analizar el impacto de la instalación de parques eólicos en el patrimonio natural y arqueológico
El consejero de Fomento y Medio Ambiente de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, y la delegada de la Junta en León, Esther Muñoz, se reúnen con miembros del colectivo Cabrera Despierta para analizar el impacto de la instalación de parques eólicos en el patrimonio natural y arqueológicoICALAgencia ICAL

La comarca de La Cabrera está situada en el noroeste del Reino de León y limita al norte con el Bierzo Bajo y la Maragatería, al oeste con Galicia, al sur con Sanabria y la Carballeda y al este con la Valdería. Se trata de una zona de parajes muy bellos con un rica vegetación arbórea, donde destacan los robles y los sauces, que conserva virgen el 90 por ciento de su territorio, que cuenta con monumentos naturales como los lagos glaciares de La Baña y Truchillas y que, además, presume de una arquitectura singular y muy bien conservada con las viviendas de corredor como protagonistas.

Una zona de enorme riqueza en la que hasta el momento se han proyectado cinco parques eólicos, cada uno de ellos con más de 49 megavatios de potencia, algo que preocupa a los vecinos de esta comarca por sus posibles consecuencias o perjuicios en el patrimonio arqueológico o natural de la zona.

Por ello, miembros de un colectivo de esta zona denominado Cabrera Despierta se han reunido este miércoles con el consejero de Fomento y Medio Ambiente en funciones, Juan Carlos Suárez-Quiñones, y con la delegada territorial de la Junta en León, Esther Muñoz, para trasladarles esta inquietud así como la necesidad de que esta zona pueda ser declarada como Parque Natural, una vieja demandade los habitantes de esta comarca, que no cejarán en su empeño hasta conseguirlo.

Cabrera Despierta ponía de relieve que los Estudios de Impacto Ambiental que acompañan a cada uno de los proyectos presentados por los promotores están “incompletos”, al tiempo que “omiten datos cruciales sobre las zonas y no reflejan nunca la verdadera magnitud de las afecciones y sus consecuencias”, por lo que le facilitaron al consejero los documentos con la información relativa para que los pueda analizar “detenidamente”.

El consejero, conocedor de las bondades de esta comarca cabreiresa, escuchaba atentamente al colectivo y les trasladaba su compromiso de que se garantizará el patrimonio natural y arqueológico de la zona. Al respecto, Suárez-Quiñones pidió un “voto de confianza” para el personal técnico que analiza el cumplimiento de los requisitos ambientales de estos parques eólicos y apostaba por marcar unos criterios exigibles a los proyectos de energía renovable.

“El impacto que los proyectos presentados puedan tener en los valores ambientales será examinado con rigurosidad tanto en los procedimientos de autorización que le compete a la Junta como en los informes que emita acerca de los expedientes del Ministerio de Transición Ecológica”, afirmaba el también número uno en la lista del PP a las Cortes por León, para quien, de este modo, solo podrán tener una evaluación de impacto favorable “si se cumple puntualmente con la normativa de protección”.

Suárez-Quiñones advertía también de la “falta de una planificación rigurosa por parte del Gobierno de España”, y aseguraba que la intervención que procediera por parte de las Comunidades Autónomas en el marco de sus competencias, “se habría podido establecer un mapa de situación de instalaciones de abastecimiento energético en el conjunto del territorio español”y, de esta forma, poder protegercon antelación los valores de todo tipo que se ven afectados, más allá del análisis de las afecciones en el expediente concreto de cada proyecto.