Fomento

El “superordenador” de Castilla y León se alimentará de energía fotovoltaica para reducir la factura eléctrica

El centro, ubicado en León, contará con un nuevo centro de transformación, independiente de la ULE, como sistema de refuerzo ante una avería eléctrica

Edificio que alberga el Centro de Supercomputación de Castilla y León ubicado en el campus universitario de Vegazana de León
Edificio que alberga el Centro de Supercomputación de Castilla y León ubicado en el campus universitario de Vegazana de LeónIcal

El Centro de Supercomputación de Castilla y León, Scayle, se alimentará de energía fotovoltaica para reducir la factura eléctrica, aumentar su eficiencia energética y reducir la huella de carbono. Para ello, contará, previsiblemente este año, con una planta solar en la cubierta de su sede en el campus de la Universidad de León que tendrá una potencia instalada mínima de diez kilovatios (KW) y ocupará una superficie de 58 metros cuadrados.

Esta actuación, según la información oficial consultada por Ical, forma parte de un proyecto más amplio que busca el refuerzo y mejora de la infraestructura de suministro eléctrico del ‘superordenador’ de Castilla y León, ubicado en el edificio CRA-ITIC, propiedad de la ULE. Con ello, la fundación que gestiona este centro tecnológico persigue aumentar la seguridad del suministro de energía y la sostenibilidad de su consumo, en un escenario de aumento de los precios de la electricidad.

Así, acaba de licitar por 237.700,13 euros (IVA incluido) el suministro e instalación de estos equipos, con un plazo de ejecución de cuatro meses desde la formalización del contrato. El concurso se encuentra abierto de momento ya que las empresas interesadas pueden presentar sus ofertas hasta el día 20 de mayo. A partir de esa fecha, la mesa de contratación tendrá que estudiar las propuestas y proponer un adjudicatario.

La instalación fotovoltaica prevista convertirá la energía que proporciona el sol, a través de la radiación solar, en energía eléctrica alterna de 400 voltios, que será inyectada directamente en la instalación interior de baja tensión del edificio. Estará acogida a la modalidad de “autoconsumo sin excedentes”, con una potencia nominal de diez kilovatios, compuesto por un único generador. Las placas ocuparán 58 metros cuadrados en la cubierta plana del edificio y estarán orientadas al sureste.

Por otra parte, el centro indica que el crecimiento de las infraestructuras computacionales de Scayle de los últimos años requiere el refuerzo de las infraestructuras industriales de apoyo para atender de forma adecuada al crecimiento sostenido de la demanda.

Para ello, se reformará el centro de transformación y la instalación de baja tensión para adaptarla a los cambios proyectados, y se dotará de un sistema de control y medida del suministro eléctrico. Con ello se mejora la disponibilidad y calidad del servicio, eliminando un posible punto de fallo al no contar en la actualidad con ningún tipo de balanceo del suministro eléctrico.

En la actualidad, el edifico CRA-ITIC dispone como infraestructura para suministro eléctrico consistente en un centro de transformación de 1.250 KVA alimentado desde la red propiedad de la ULE. Un corte prolongado de energía supone para el Centro de Supercomputación un “perjuicio incalculable”, según sus responsables, por lo que se proyecta la instalación en reserva de una máquina transformadora de 1.250 KVA en redundancia y que en caso de avería del transformador en funcionamiento, pueda entrar automáticamente en funcionamiento el transformador en reserva.

Las actuaciones previstas en esta licitación serán cofinanciadas mediante el convenio entre el Ministerio de Ciencia e Innovación y Scayle para la ejecución del proyecto de ampliación de la capacidad de cálculo e instalación, que recibe financiación del Fondo Europeo de Desarrollo Regional en el marco del Programa Operativo Pluriregional de España, 2014-2020, Programa Operativo de Crecimiento Inteligente.

Crecimiento

Además, la Junta ya ha adjudicado el concurso de redacción del proyecto y dirección de la obra del nuevo edificio, con un plazo de redacción de tres meses, lo que permitirá solicitar la licencia municipal y licitar en tres millones de euros las obras, algo previsto para el mes de junio, de forma que las obras comenzarán en septiembre con un plazo de ejecución de 18 meses, finalizando en 2024. La sede se ubicará en una parcela situada en la calle Profesor Gaspar Morocho, junto al Centro Integrado de Formación Profesional.

La Junta tiene previsto un importante crecimiento de la máquina en los próximos cinco años, a través de diversos proyectos financiados por los fondos Next Generation, tanto con cargo al REACT EU (15 millones de euros) como al Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (3,5 millones).

Permitirán, entre otras mejoras, una ampliación de la capacidad hasta alcanzar los diez PetaFLOPs de potencia de cálculo (actualmente tiene 0,5), los 20 PetaBytes para almacenamiento de datos (actualmente cuenta con un PetaBytes) y los 128 TeraBytes de memoria RAM para ejecución de servidores virtuales (actualmente es de 16 TeraBytes).

Finalmente, el centro cerró 2021 con 500 servidores virtuales desplegados en la nube de Scayle y ejecutó en los diferentes sistemas de cálculo trabajos por un total de 24.006.680 de horas de CPU y 45.753 horas de cálculo en GPU -unidad de procesamiento gráfico-.