Medio Ambiente

Vecinos de un pueblo de León intentan frenar la reapertura de una mina de silice a cielo abierto

La explotación en la provincia leonesa lleva cerrada alrededor de 50 años

Entrada a la localidad leonesa de Oville (León)
Entrada a la localidad leonesa de Oville (León)La Razón

Medio centenar de vecinos de la localidad de Oville, enclavada en las estribaciones de los Picos de Europa y perteneciente al Ayuntamiento de Boñar, en coordinación con miembros de otras plataformas que tienen por objeto la Defensa de la Cordillera Cantábrica y la Montaña Central Leonesa, han creado una plataforma que busca frenar la reapertura de una mina de sílice a cielo abierto que lleva medio siglo cerrada.

Su presidente, Ramón Mayordomo, expresa el “absoluto rechazo a este proyecto, por considerar que supone un irreparable impacto ambiental y una grave amenaza para la integridad de las personas y para la riqueza floral y faunística de la zona”.

Recientes estudios, señala el colectivo en un comunicado, han puesto de manifiesto que el polvo de sílice y las consiguientes partículas en suspensión que supondría esta actividad minera a cielo abierto, provocan una gran irritación de las vías respiratorias y tras continuas exposiciones puede derivar en múltiples enfermedades del sistema respiratorio, pudiendo provocar cáncer.

La plataforma Oville Montaña Limpia considera esta posible apertura de la mina como una “expropiación” y se han organizado para llevar a cabo labores de investigación, comunicación e información, presentación de alegaciones o recogida de firmas, “con el fin de lograr el objetivo común de parar de la mejor forma posible la reapertura de la mina”.

En esa línea, señalan, están los vecinos de la colindante localidad de Valdecastillo, que están afectados y sufren las consecuencias desde hace ya varios años, ya que en ese pueblo se desarrolla esta actividad minera “sin control de ninguna clase con un terrible impacto ambiental que las administraciones a fecha de hoy no han obligado a poner los medios para su inminente reparación”.

Insisten en que a nivel medioambiental la reapertura supondría un importante deterioro de la vegetación, así como la contaminación del agua y del aire, perjudicando a la ganadería extensiva que todavía se practica en ese valle, y a la fauna autóctona (corzo, perdiz roja, ciervos (zona de berrea), y zona de paso del osos pardo visto recientemente en la zona.

La plataforma ya ha iniciado actuaciones ante la Junta -sección de Minas- y se opondrán rotundamente a la concesión de las oportunas y preceptivas licencias, además de “acudir a los tribunales y cuantos medios sean necesarios para salvaguardar la catástrofe que auguran se producirá si esto no se para”.