Solidaridad

Aumenta la donación de plasma, que crece un 7% en Castilla y León en el último año

Es fundamental para la obtención de medicamentos básicos en el tratamiento de inmunodeficiencias

Varias bolsas de transfusión de sangre colgadas en una sala del Centro de Transfusión de la Comunidad de Madrid, en una imagen de archivo
Varias bolsas de transfusión de sangre colgadas en una sala del Centro de Transfusión de la Comunidad de Madrid, en una imagen de archivoEduardo ParraEuropa Press

Castilla y León se ha convertido en la comunidad autónoma que más plasma destina a fraccionamiento industrial por cada 1.000 habitantes. Así se confirma con los últimos datos ofrecidos por la Consejería de Sanidad, correspondientes al año 2022, donde se ha producido un incremento del 7 por ciento respecto a la cantidad obtenida el pasado año.

En 2018 el Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León ponía en marcha un programa específico para la obtención de plasma sanguíneo y para la fidelización de sus donantes en todas las provincias castellanas y leonesas. Resultado de ello ha sido el progresivo aumento anual de este tipo de donaciones que sirve para la obtención de medicamentos básicos en el tratamiento de inmunodeficiencias; de enfermedades raras en niños; para el abordaje de patologías relacionadas con la coagulación, como las hemofilias; y fundamental en procedimientos asistenciales complementarios para pacientes oncológicos, grandes quemadas, enfermos de Covid-19 y otras patologías graves.

Pero no todo son buenas noticias, ya que a pesar de la evolución de estos datos, la cobertura media en Castilla y León de las necesidades de albúmina cubiertas con este hemoderivado obtenido en la Comunidad ha sido del 74 por ciento y en el caso de la de las inmunoglobulinas, del 44 por ciento, lejos aún de la autosuficiencia.

Dos formas de donar plasma

Para donar plasma los requisitos necesarios son similares a los de la donación de sangre, pudiendo hacerlo cualquier personas que goce de buena salud, de entre dieciocho y 65 años, con un peso mayor de los 50 kg y, preferentemente, de los grupos AB+, AB-, B+ y B-.

La donación de plasma humano puede llevarse a cabo de dos formas; a través de una donación de sangre convencional, que se fracciona para obtener hematíes, plaquetas y plasma; o mediante la llamada aféresis, por medio de una máquina especializada que selecciona del donante el componen sanguíneo que se necesita y le devuelve el resto, técnica que permite obtener hasta tres veces más que de la forma inicial.