Opinión

La burbuja de las nuevas tecnologías

Tras la dimisión en masa de cientos de empleados de la red social más poderosa del planeta, Twitter, se pone en entredicho el futuro de esta gran ciber-comunidad y sobre todo se pone de manifiesto que la era digital no es perfecta y que haber puesto todos los huevos en la misma cesta hace que nuestro histórico multimedia y de opinión se tambalee definitivamente.

Porque no nos engañemos, lo digital está en servidores ajenos a nuestro control y los recuerdos y demás pueden irse de un plumazo en una décima de segundo a lo “cierre de Megaupload”.

¿O acaso nos pensábamos que guardar nuestra memoria es eterno? Pero nos pasa en todo, desde cuando hacemos 500 fotos de un día de vacaciones hasta cuando reservamos un viaje o compramos un billete de tren, los famosos “datos” están en la nube, lo mismo ahora empieza a llover y le riegan al vecino con aquella bochornosa foto de vacaciones con tu pareja en Italia.

Nada es para siempre, como rezaba el título de aquella serie, y la nueva era no es ajena a ello. En teoría todo es evolución y demás, pero si miramos los resultados económicos y sociales tras la era de la globalización parece que no es del todo cierto y las tecnologías del ocio tampoco se libran.

¿A dónde pueden ir ahora todos los que quieren, aman, lloran, ríen y odian en 280 caracteres? ¿Tal vez se vuelvan a utilizar de nuevo los bares como entorno social? ¿Volveremos a los pasquines para comunicar un evento? ¿Tendremos que mostrar nuestro estado anímico a nuestros seres queridos en lugar de a desconocidos?

Quién sabe, sólo el tiempo lo dirá.

Nada, es broma, todos sabemos que llegará otra red social, o tendremos un Twitter 2.0, o un Whipper o un Wopper, estamos inmersos en todo esto, no podemos escapar a la digitalización. El pájaro azul bien puede dar paso a una comadreja amarilla. Ya vivimos la transición de Messenger a Skype y luego a Whatsapp, ya pasó con Fotolog ¿y pasará con Twitter? Las modas y los periodos de algo que funciona cada vez son más cortos y estamos asistiendo a un auténtico desfile de novedades y auges de estimulación que cada nuevo invento que sale deja en pañales al anterior.

Arden las redes, brutal, hashtag, infoxicación, tendencia…son palabras y términos que nos han ido calando en estos últimos años y que han transformado nuestra dialéctica, lo hermoso del lenguaje es que es el mayor indicador de la maravillosa era que puede que estemos viviendo ¿verdad bro?

¡Ay! ¡Si escucháramos más a nuestros abuelos y abuelas, los grandes sabios olvidados de la gran tribu humana que tantos atascos consiguieron sortear en su día a día a lo largo de la historia reciente!

¿Y si volvemos un poco a lo anterior? ¿Y si nos retro-transformamos en algo analógico?

De momento vamos a tomarnos un café y a estar expectantes con lo que ocurre en la gran televisión de la vida, cada día una gran aventura.

Siempre nos quedará el Teletexto ¿o tal vez no?