El Tiempo

Los alcaldes responsabilizan a la CHD de la magnitud de los daños ocasionados por riadas

El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, pide la declaración de zona catastrófica para los municipios vallisoletanos afectados por las inundaciones

El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, durante su visita a los municipios más afectados por las riadas
El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, durante su visita a los municipios más afectados por las riadasDiputación de ValladolidDiputación de Valladolid

Varios alcaldes de las provincias de Valladolid y de Ávila responsabilizaron a la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) de la magnitud de los daños ocasionados este fin de semana por el desbordamiento de numerosos ríos en Castilla y León. Y así lo han hecho el día que la Agencia de Protección Civil y Emergencias ha decretado el fin de la alerta vigente desde el pasado jueves 18 de enero, al remitir los fenómenos meteorológicos adversos –nevadas, lluvias, vientos y temperaturas mínimas– que motivaron su declaración

Los desembalses preventivos, la falta de regulación de los ríos, la ausencia de limpieza y la información de crecidas con escaso margen de actuación figuran entre las principales quejas de los alcaldes y también del presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, durante su visita a los municipios de Rábano y Viana de Cega.

"No se puede soltar agua sin previo aviso y en cantidades que son inasumibles para los pueblos”, lamentó Íscar en Rábano, uno de los municipios más afectados por el desbordamiento del río Duratón debido al desembalse preventivo realizado por la CHD días atrás en el embalse de Las Vencías, aguas arriba en Fuentidueña (Segovia).

El presidente de la institución provincial vallisoletana llamó la atención sobre la necesidad de controlar "un bien tan escaso como es el agua, tan necesaria para el abastecimiento de los municipios y para el sector primario agricultura y ganadería", afirmó, en referencia a sistemas de retención de agua, embalses o azudes.

Otra de las quejas de Conrado Íscar fue la falta de limpieza de los cauces de los ríos, que en su opinión contribuyó a acelerar el desbordamiento en cantidad e intensidad de agua.

Por ello reclamó a la CHD la puesta en marcha de una limpieza preventiva de los cauces y riberas, y ha recordado que muchos municipios estarían dispuestos a realizarla para evitar este tipo de situaciones, "pero no nos dejan: ni comen ni dejan comer, como el perro del hortelano”, señaló. "Si estamos juntos, si todos vamos de la mano, muchas de estas situaciones no se volverían a repetir”, subrayó.

Por último, y ante la situación contemplada, el presidente de la Diputación de Valladolid avanzó que va a solicitar la declaración de zona catastrófica para los municipios vallisoletanos afectados por las inundaciones. En este sentido, lamentó que Valladolid “se vuelve a encontrar en una situación similar que no acontece afortunadamente todos los años, pero que se repite”; y añadió que en esta ocasión “le tocaba a Rábano o Viana, localidades que, por sistema, sufren año tras año ante estas crecidas, ante esta falta de regularización del caudal del río y que provoca situaciones como esta”.

Por su parte, alcalde de Viana de Cega, Alberto Collantes, insistió en sus críticas a la CHD por la información deficiente sobre el estado del río Cega en la estación de aforo situada en Megeces (Valladolid), aguas arriba y la más cercana a esa población donde una veintena de vecinos tuvieron que ser desalojados durante la madrugada del domingo.

Al respecto se refirió al desfase existente entre la información aportada por la CHD, a través de su aplicación, relativa a la estación de Megeces. "Los datos que ofrecía a las once de la noche (del pasado sábado) no tiene nada que ver con lo que luego ocurrió horas después (a la una de la madrugada): faltan metros cúbicos que 'se han perdido por el camino, nadie dice dónde estaban, y la Confederación tiene que reconocerlo, decirlo claramente", indicó.

Collantes reclamó a la CHD que colabore con los municipios "en lugar de emitir comunicados con la piel muy fina y echando la culpa a los alcaldes de lo que están haciendo y es su trabajo", informa Efe.

En la misma línea, el alcalde de Papatrigo (Ávila), Mariano Robles, se hizo eco de los cuantiosos daños ocasiondos en uno de los cuarenta municipios más afectados En la zona norte de la provincia por el desbordamiento del Adaja, Arevalillo, Trabancos y Zapardiel, así como de numerosos arroyos y escorrentías: "Son los culpables de lo que nos ha sucedido", acusó a la CHD.

Defensa de la CHD

Ante estas críticas, la presidenta de la Confederación Hidrográfica del Duero, María Jesús Lafuente, se remitió al Plan de Protección Civil ante el riesgo de inundaciones en Castilla y León (Inuncyl), tras las críticas de alcaldes por la gestión del último episodio de las crecidas, porque el protocolo “únicamente” recoge que deben trasladar información hidrológica.

Además, cuando se declara la fase de alerta, aseguró que son otros los organismos que deben adoptar medidas que puedan “minimizar” los daños personales, materiales o ambientales.

Asimismo, indicó que en ese caso deben ser las administraciones competentes las que deben trasladar información por sus propios canales, no la CHD, que señaló emite tres partes al menos al día, de forma que son ya 26 las comunicaciones trasladadas desde el lunes, gracias al trabajo “intenso” del personal, especialmente en las zonas con más complicaciones. Además, destacó la “colaboración estrecha” con todos los organismos implicados.

También la presidenta de la CHD apuntó que en el caso del río Cega no exige ningún embalse gestionado por la Confederación por lo que estos días no se pudo producir ningún desembalse que provocara la crecida. María Jesús Lafuente explicó que la avenida registrada es fruto de las intensas lluvias y el deshielo y recordó que los caudales históricos, especialmente altos en esta ocasión, forman parte del régimen natural del río.

Por otra parte, recordó que la Confederación actúa en los ríos en el marco del Programa Anual de Conservación y Mantenimiento de Cauces en la cuenca del Duero con una inversión de 6,5 millones de euros en 2023, para mejorar la continuidad fluvial pero recalcó que las inundaciones son un fenómeno natural. En el caso de la provincia de Valladolid, la inversión en el periodo de 2021-2023 fue de casi tres millones de euros.