Educación

Los alumnos de Castilla y León obtienen 2,5 veces más sobresalientes en Bachillerato que en la EBAU

Los estudiantes que logran las notas más altas en la Prueba de Acceso a la Universidad pasa del 1,9% en 2015 al 7,8% en 2024

Prueba de la EBAU en la Universidad de Valladolid
Prueba de la EBAU en la Universidad de ValladolidRubén Cacho/Ical

Más de 11.000 estudiantes de Castilla y León esperan ansiosos la llegada del próximo jueves para conocer la nota obtenida en la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU), tras haber realizado los exámenes esta semana. La calificación marcará el futuro de estos jóvenes, ya que les permitirá acceder a las carreras que desean estudiar y, por tanto, será un paso decisivo en su futuro profesional. No en vano, la nota de acceso a la universidad se calcula ponderando un 60 por ciento la puntuación media normalizada para Primero y Segundo de Bachillerato con el 40 por ciento de los exámenes de la fase general u obligatoria de la antigua EBAU (a la que puede sumarse cuatro puntos, hasta alcanzar el 14, en la fase de ejercicios voluntarios). La clave no radica en aprobar la PAU, ya que el 97 por ciento de los presentados en la convocatoria ordinaria supera la prueba sino, sobre todo, lograr la nota más alta posible, especialmente si el alumno desea matricularse en un grado o doble grado con mucha demanda y, por tanto, con una nota de corte elevada (por encima del 12). De ahí la importancia de los sobresalientes, que los alumnos de Castilla y León obtienen 2,5 veces más en Bachillerato que en la Prueba de Acceso a la Universidad.

El porcentaje de estudiantes de Castilla y León que en curso pasado obtuvo una nota de 9 o 10 en Bachillerato es el 19,6 por ciento frente al 7,8 por ciento de los logrados en la fase general de la EBAU. Los datos del Sistema Integrado de Información Universitaria (SIIU) del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, consultados por la Agencia Ical, muestran un desajuste entre la tasa de alumnos que acaban el Bachillerato con sobresaliente y el que obtiene esa calificación en la PAU. Algo que es generalizado en toda España, ya que la tasa de estudiantes con las mejores notas en la media nacional está en el 20,6 por ciento en Bachillerato frente al 6,5 por ciento en la prueba de acceso a la Universidad.

Y es que el porcentaje de estudiantes de la Comunidad que logra una nota de sobresaliente en la fase obligatoria de la antigua Selectividad ha pasado del 1,9 al 7,8 por ciento entre los años 2015 y 2024, que son los últimos datos publicados. Es decir, se ha cuatriplicado. A la espera de saber el impacto que tendrá la nueva Prueba de Acceso a la Universidad, que los alumnos realizaron entre el martes y jueves pasado, tras haberse eliminado la opción de elegir entre dos modelos de examen, como sucedía desde la pandemia, lo cierto es que los castellanos y leoneses conseguían más puntuaciones máximas en la PAU que la media de los estudiantes de España, que el año pasado se quedaron en el 6,5 por ciento.

No en vano, Castilla y León se situó en el séptimo puesto con más sobresalientes en comparación con otras comunidades, por detrás de Extremadura (15,1 por ciento), Cantabria (12,5), Murcia (12,4), Asturias (10,7), Andalucía (10,5) y Castilla-La Mancha (9,1 por ciento). En el lado opuesto, estuvieron Baleares (1,9 por ciento), Valencia (2) y Cataluña (2,8). Eso sí, la proporción de estudiantes con calificaciones excelentes en Bachillerato con las obtenidas en la EBAU, que en Castilla y León se sitúa en el 2,5, se dispara en otros territorios como Valencia, hasta nueve (18 por ciento de sobresalientes en Bachillerato frente al dos por ciento en Selectividad); Baleares, siete veces más; Canarias, casi cinco veces más; Cataluña, 4,5 veces más, y Galicia, cuatro más. Por el contrario, es solo de 1,4 veces más en Cantabria (18 por ciento en Bachillerato frente al 12,5 por ciento en la EBAU) y 1,7 en Extremadura (26,3 por ciento en Bachillerato y 15,1 por ciento en la Prueba de Acceso a la Universidad).

El cambio del modelo de examen de la PAU, que busca reforzar su carácter competencial, con al menos entre un 20 y 25 por ciento de preguntas orientadas a evaluar habilidades como el pensamiento crítico, la creatividad y la capacidad de argumentación, puede poner fin a la escalada de buenas notas que, curso tras curso, cosechan los estudiantes en la EBAU. El año pasado ya hubo una bajada considerable, tras años de pandemia con más facilidades, cuando el 7,8 por ciento de los matriculados obtuvo un sobresaliente en la prueba frente al diez por ciento de los años 2021 y 2023 y el once por ciento en 2022. En el año 2015, menos del dos por ciento de los estudiantes lograba una nota de 9 o 10 en la Selectividad.

Nota media de 7,2

Pero la subida de notas no se limita solo a los alumnos más ‘brillantes’ sino que también ha subido, entre 2015 y 2024, la calificación media de los aprobados en la Selectividad en Castilla y León, que pasa del 6,5 al 7,2, que son siete décimas menos que la nota obtenida en el Bachillerato. La cifra del año pasado en la Comunidad es la segunda más alta del conjunto de regiones, solo por detrás de Cantabria (7,4) y Extremadura (7,3) y compartida con Andalucía y Navarra (7,2).

El SIIU constata que esta ‘inflación’ de calificaciones que ha alterado las estadísticas de la Selectividad comienza en Bachillerato. No en vano, casi uno de cada cuatro alumnos de Castilla y León (19,6 por ciento) que se presentó el año pasado a esta prueba de acceso a la universidad obtuvo sobresaliente en esa etapa previa en el instituto, hasta situarse en el octavo más alto de España. Un porcentaje que en 2015 era del 7,2 por ciento. En el año 2022, al igual que en el análisis de los que lograron la nota más alta en la EBAU, el porcentaje fue superior, al llegar al 22 por ciento. En este apartado, también hay grandes diferencias, con autonomías que doblan a otras. Son los casos de Murcia (29,7 por ciento) y Canarias, Andalucía y Extremadura frente a Cataluña (12,8 por ciento), Baleares (13,6 por ciento) y Navarra (15,2 por ciento).